La firma automovilística Renault planteó el miércoles la aplicación de un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal durante 30 días para la planta sevillana de cajas de cambios que afectará a sus 1.200 trabajadores y que se llevará a cabo entre enero y julio de 2009. Palencia parará los mismos días y Valladolid lo hará dos meses.
El bache que está atravesando la industria del automóvil, con caídas de las ventas del 50% en el último mes, ha llevado a Renault a proponer un ERE para el año que viene en previsión de que el mercado seguirá desplomándose, al menos durante el primer semestre. El miércoles la dirección de la firma del rombo presentó al comité intercentros su propuesta de regulación de empleo, de carácter temporal y que, por tanto, no implica despidos, en sus tres plantas españolas.
Para la factoría sevillana de San Jerónimo, especializada en la producción de cajas de cambios, plantea un ERE por espacio de 30 días -a aplicar no de manera consecutiva, sino en función de lo que marque la evolución del mercado- y que afectará a la totalidad de la plantilla, integrada por 1.200 trabajadores. El periodo de aplicación se extenderá desde el 12 de enero hasta el 15 de julio, fecha a partir de la cual, la compañía confía en que mejore la situación para la industria del motor.
Esta circunstancia no supondrá el cierre total de la factoría, sino que la paralización se hará de forma parcial por líneas de actividad. Así lo aseguró Rubén Moreno, miembro del comité de empresa de la planta de San Jerónimo, que el miércoles estuvo presente en la reunión celebrada en Valladolid.
En el caso de la planta de Renault en Palencia, las condiciones del ERE coinciden con las de Sevilla, 30 días, al igual que para la factoría de motores vallisoletana y en las oficinas centrales, mientras que este periodo se duplica para la factoría de carrocería y montaje también en Valladolid, donde se protagonizaron las primeras protestas. Un centenar de delegados sindicales cortó el tráfico en la N-601 en demanda de soluciones de futuro para las plantas del rombo.
De vuelta a Sevilla, el comité mantuvo encuentros con los tres turnos de trabajo para explicar a los compañeros los detalles de la propuesta presentada por la empresa. La primera reacción, según Moreno, es de "rechazo" porque, entre otras cuestiones, la dirección no ha acompañado el planteamiento de un plan industrial de futuro, sino que se limita a "especular" con la hipótesis de que el escenario mejore en la segunda mitad del año.
Además, en la próxima reunión prevista para el día 11 y en la que se discutirán los detalles del ERE, los sindicatos elevarán a la dirección que el expediente deje fuera a los trabajadores mayores de 55 años, y que la plantilla cobre el 100% de su salario mientras se aplique el ERE -y no lo que establece la ley, un 70% de la base de cotización-, explicó Moreno, quien argumentó que "la crisis no la deberían pagar los trabajadores".
