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Se fugan dos niños de un centro en llamas

El incendio registrado en un centro de menores inmigrantes de Arcos de la Frontera fue aprovechado para la huida.

el 13 may 2010 / 19:28 h.

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Unos niños pasean en la entrada de un centro de acogida de Sevilla.
Un incendio en un centro de menores inmigrantes de la localidad gaditana de Arcos de la Frontera (Cádiz) provocó en la madrugada del jueves el desalojo de 25 jóvenes y dos cuidadores, sin causar daños personales. El fuego se localizó en una de las habitaciones de la primera planta, ocupada por dos menores, uno de los cuales se encontraba durmiendo y el otro en el baño, siendo éste último el que alertó de la presencia de las llamas. Los bomberos accedieron al edificio inundado de humo, localizando la habitación y procediendo a la extinción del incendio.

El fuego afectó a la totalidad de la estancia con su mobiliario, y el humo y la temperatura al resto del edificio. Además, en la habitación siniestrada, se vieron afectados los revestimientos, pero no la estructura de la misma. Según el servicio de Emergencia del 112, dos de los menores que se encontraban en el centro aprovecharon la confusión y la alarma generada por el fuego para fugarse.
Hasta el lugar de los hechos se desplazó una dotación de bomberos de Arcos con dos vehículos, utilizando un total de 500 litros de agua en la extinción del incendio, que finalizó sobre las tres y media de la madrugada.

Estos centros están destinados a menores inmigrantes que entran en España de manera ilegal no acompañados por adultos. En Andalucía hay un millar de menores extranjeros tutelados, la mayoría marroquíes, cuya repatriación lleva años bloqueada. Al tratarse de menores, para devolverlos a su país, es necesario asegurarse de que sus familias pueden hacerse cargo de ellos pero la Junta de Andalucía ha denunciado reiteradamente la falta de colaboración del Gobierno marroquí para localizar a sus familias y ofrecer garantías sobre su bienestar en caso del retorno.

La semana pasada, la UE presentó un plan de acción para reforzar la protección de estos menores con iniciativas como la creación de normas comunes de tutela y representación legal, la solidaridad y el reparto de responsabilidades entre todos los Estados miembros y el uso de fondos europeos para la prevención en origen, la acogida y el retorno del niño. El plan también especifica que "los menores deben estar siempre alojados en centros apropiados" y aboga por asegurar "medidas de transición" ante el riesgo de perder la protección al cumplir la mayoría de edad.

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