La huelga de 48 horas iniciada esta madrugada por la plantilla del mercado central de abastos, Mercasevilla, ha sido secundada "al cien por ciento" por los trabajadores pero las labores de carga, descarga, facturación y cobro han sido materializadas "con normalidad" y el género ha sido comercializado, según ha manifestado a Europa Press Salvador López, presidente de los empresarios mayoristas de pescado. Mientras los trabajadores protestan contra los 129 despidos promovidos por la empresa, López señala que la experiencia de los anteriores paros técnicos ha servido para que el mercado funcione "con normalidad" pese al paro técnico.
El portavoz de IU junto a los trabajadores de Mercasevilla. Foto: IU
Salvador López ha recordado que ante los diversos paros técnicos protagonizados por la plantilla del mercado central, que afronta una dura reestructuración con 129 despidos y la externalización de 39 puestos de empleo, los empresarios mayoristas recurren a la empresa 'Gesico', dedicada a la gestión informática de cobros, para las labores de facturación y cobro y a personal ajeno para los trabajos de carga y descarga.
La primera de las dos madrugadas en las que regirá la huelga previa a los despidos transcurrió así con toda normalidad y las mercancías fueron comercializadas sin incidencias, según López. Felipe Gómez, presidente de los minoristas de pescado, matizó que la jornada ha transcurrido con relativa normalidad.
A su juicio, aunque las labores sufrieron más dificultad de lo habitual, las mercancías circularon y en principio, no hay problemas de abastecimiento. Eso sí, recordó que la huelga se celebra en fechas de poca repercusión por la disminución de movimientos propia de agosto.
El miércoles, la dirección de Mercasevilla comunicó oficialmente las cartas colectivas del expediente de regulación de empleo, que contempla el despido de 107 trabajadores indefinidos y 22 temporales de la bolsa de empleo. Los despidos, con indemnizaciones de 20 días por año de servicio, serán efectivos el lunes.
De esta forma, sólo una decena de personas seguirán trabajando en Mercasevilla después de la privatización de los servicios de carga de género y facturación que se prestaban en la lonja de pescado, una liberalización que el Gobierno de Juan Ignacio Zoido justifica en el cumplimiento de las regulaciones comunitarias.
El Ayuntamiento argumenta que aplica la sentencia de la UE que asegura que el que la lonja preste esos servicios va contra la libre competencia, mientras que los trabajadores defienden que la Unión Europea no ha emitido aún ningún dictamen concluyente o definitivo.
