Sobre estas líneas puede contemplar un paisaje idílico, un lugar bañado por el mar que hace pensar en el más agradable y pacífico rincón del Caribe. Lamentablemente no es así. Se encuentra en Pásig (Filipinas) y para llegar allí tendrá que subirse a bordo de una aerolínea señalada en la lista negra de la aviación internacional y no temer a que, entre baño y baño, la denominada avispa negra clave su aguijón en su cuerpo. Raro sería contarlo...
Filipinas, como otros países del sudeste asiático (Vietnam y Laos), forman parte de la nónima de lugares considerados habitualmente peligrosos. El Ministerio de Asuntos Exteriores de España sin embargo precisa que hay territorios mucho más preocupantes, como Yemen, donde un atentado sufrido por turistas nacionales hace tres años aniquiló a (casi) cualquier tour operador tradicional.
No obstante hay quienes ven en estos puntos negros antes que una guía de sitios a evitar, un fascinante recorrido donde desmontar tópicos. Un vistazo al foro digital Losviajeros.com permite comprobar cómo este verano son varias decenas las personas dispuestas a visitar rincones como Cité Soleil en Haití o Tonkolili en Sierra Leona.Más fascinanción ejerce aún Thailandia, país que ha visto trastocadas sus previsiones turísticas desde que los Camisas Rojas desencadenaran meses atrás una violenta protesta antigubernamental.
La agencias clásicas no cuentan con el país oriental, pero las más avezadas y expertas en turismo de riesgo aseguran tener una cartera de clientes importante deseosos de vivir de primera mano el conflicto.
"Sevillano, de entre 32 y 45 años, sin cargas familiares, con ingresos medios/altos, liberal de mente". Así, a grandes líneas, traza Ángel Benítez (de la Agencia Reusa de Los Remedios) el retrato robot del demandante de este tipo de destinos. "El que sean hoy lugares que entrañen cierto riesgo no implican que también sean países cargados de una enorme riqueza cultural y paisajística", concluye.
Por ello siempre habrá destinos típicos como Líbano, donde pese a la continua amenaza terrorista, siguen llegando cada año miles de turistas en busca de un pasado fascinante con vestigios arquitectónicos.Ahora bien, si parece claro que para llegar a Matalascañas hemos de enfilar la A-49, ¿qué hacer para llegar a la misma puerta del fastuoso Templo de Angkor Wat, en Camboya? En avión: Sevilla-Barcelona- Frankfurt- Singapur-Phnom Pehn. Ya estamos en Camboya, luego habrá que coger dos trenes y un autobús. En tiempo total la hazaña supone tres días de viaje.
Si llega sano y salvo -cosa que no le asegura nadie- podrá sentirse más pletórico que Marco Polo. "Uno de los mayores placeres del viajero no es tanto estar como llegar, pisar una tierra, saberse único, diferente y luego mezclarse en una sociedad radicalmente diferente a la propia". Son palabras del naturalista Gerald Durrell. ¿Quién no firmaría por partir a Camboya ahora mismo?
DE UTILIDAD
A países como Afganistán, Líbano e Iraq el Ministerio de Exteriores desaconseja viajar a no ser que sea "estrictamente necesario". En otros como Israel, Egipto y la República del Chad recomienda "extremar las precauciones". Thailandia se ha incorporado este año a la lista negra. Y otros destinos como Camboya, Laos y Filipinas siguen entrañando cierto riesgo. Visite la web www.maec.es para informarse y si le gustan estos destinos pruebe a barajar precios en www.bidon5.es.
