Un amplio despliegue policial llevó el jueves a arrestar a tres miembros de la banda de atracadores que tenía asediados a bares y salones de juegos de la Macarena, en los que los ladrones entraban encapuchados y, con gran violencia, amenazaban a dueños y clientes para destrozar las tragaperras y llevarse el dinero.
Los tres detenidos tienen entre 18 y 20 años, antecedentes por robo y un historial de violencia en los asaltos cometidos en los últimos meses, por lo que el grupo de Atracos de la Policía Nacional se pertrechó con patrulleros, unidades antidisturbios e incluso los GOES -la fuerza de asalto más especializada con la que cuenta la Policía en Sevilla- por si reaccionaban con agresividad.
Hizo falta arrestar a los tres a la vez, para que no se avisaran entre sí y ocultasen las pruebas o intentaran huir, para lo que se aseguraron de que estaban en sus domicilios del Polígono San Pablo para entrar exactamente al mismo tiempo. Se hizo a las siete de la mañana, con una orden judicial que permitió registrar sus casas, donde se encontraron una escopeta semiautomática, 28 cartuchos del calibre 12,70, un subfusil simulado, varias catanas, una pistola falsa, varias mazas de grandes dimensiones como las empleadas para reventar las cajas registradoras y las máquinas tragaperras, varios pasamontañas con los que se ocultaban el rostro y gran cantidad de monedas.
Las pruebas recogidas por la Policía Científica permiten atribuirles cuatro robos, cometidos entre julio y el pasado día 18 en la Macarena y su entorno. Pero la investigación continúa porque la Policía está segura de que podrá demostrar que son autores de más asaltos, ya que tras esos cuatro hubo al menos tres más en los que la forma de actuar y la descripción de los ladrones era idéntica.
También se busca a otros miembros de la banda, porque en atracos como el que intentaron el 18 de noviembre en la avenida Medina y Galnares eran cuatro las personas que, en dos motos, entraron en un bar pero huyeron sin el botín. Unos minutos después, las mismas personas, en los mismos vehículos y con las mismas armas -un cuchillo grande y una machota para romper las tragaperras- entraron en otro bar de la cercana calle Fray Isidoro de Sevilla, de donde sí se llevaron dinero; y más tarde en un salón de juegos de San Jerónimo. Ambos son robos que aún se investigan, igual que uno anterior en el bar Damasco de la calle Leal Castaño.
La Policía explicó que la banda tenía "una clara distribución de tareas" y siempre actuaba igual: buscaba un local -bar o salón recreativo- no lejano a sus domicilios aunque tampoco en su barrio, para evitar ser reconocidos; estudiaban el objetivo y dos de ellos entraban tapados con pasamontañas o cascos de moto cuando iban a abrir o cerrar, con clientes dentro a los que amenazaban. Reventaban las máquinas y se llevaban el dinero en unos minutos.
Los detenidos son Jonatan L.M., de 18 años y con dos arrestos por robo; Raúl A.M., de 19 años y dos detenciones, y Francisco Javier J.C., de 20 años y con dos arrestos por robo, el último el mes pasado. La Policía prevé llevarlos ante el juez hoy o mañana.
