El partido Croacia-España del pasado lunes triunfó en redes sociales como Twitter y no sólo porque nos dio la clasificación para cuartos de final de la Eurocopa. Es conocido y notorio que no hay nada que ocurra en el mundo 1.0 que no se refleje -incluso hasta rozar la mofa- en el 2.0. Lo sabe perfectamente la periodista y comentarista de Telecinco Sara Carbonero, que estuvo en el punto de mira de todos los tuiteros en el último partido de la Roja. El hashtag #GraciasSara fue lo más comentado y no para bien de la periodista por sus "escuetas" intervenciones durante la retransmisión.
Algunos de los tweets: "-¿Sara quien crees que ganara la Eurocopa? -¿Que Eurocopa? -#graciassara", "-Sara, ¿como esta la posesión? -Ya hemos llamado al exorcista -Vale, #GraciasSara", -Sara, ¿qué piensas de Casillas? +Casillas es eso que te sacan cuando te enfadas. -#GraciasSara", "-Sara, han regado el campo?. - No, sólo han puesto los aspersores. -Gracias Sara. #graciassara".
Twitter, anonimato, un humor más o menos digerible y la popularidad de la periodista Sara Carbonero volvieron a alimentar de polémicos contenidos la red social de moda. Desde el inicio del partido de fútbol España-Croacia -por cierto, con el minuto más visto de la Historia de la TV en España- el ecosistema de microblogging hirvió con miles de usuarios que se mofaban de la periodista al considerar banales u obvios sus comentarios al retransmitir los partidos.
Corrieron como la pólvora centenares de chistes malos o de dudoso gusto como los de @jjavin: "RT @FueraTelecinco: -Sara, ¿qué opinas de la primera parte? - Que es la mitad. -Gracias, Sara. o @Loko_de_atar: "-Sara, ¿cómo ves el cambio de Silva y Cesc? -Sale uno y entra otro. -Gracias Sara. O el que colgó @pmanero: "Sara ¿Silva para este partido? -Yo silvo [sic] pero no se me va a oír -Gracias Sara".
La colección es interminable y estos ejemplos están sacados de una de las decenas de recopilaciones que también trufaron internet, la de Diariocritico.com. Pero hay muchos más sitios donde buscar.
De algunos chistes se puede decir que tienen gracia. Otros son machistas y ofensivos.
La coletilla "Gracias Sara" remeda al "gracias Sara" con el que su compañero en el equipo de retransmisiones de Mediaset Paco González la despide -en un tono que muchos oyentes interpretan como desgana o desprecio- cuando la periodista transmite alguna información a pie de campo.
Carbonero ya estuvo en el ojo del huracán de las redes sociales en el pasado mundial de Suráfrica, cuando fue acusada por los tabloides británicos de desconcentrar a su novio, el portero de la selección española Iker Casillas, en el único partido que perdió la Roja hace dos años.
En esta ocasión muchos de los tuits recogen el malestar de espectadores de televisión que consideran que la profesional está poco capacitada para retransmitir los partidos y achacan su fama a la relación con el portero.
Por otra parte, en lo que se puede llamar el lado oscuro de Twitter abundan campañas de descrédito o bulos, como el que intentó hacer creíble un falso golpe de Estado en Portugal o recurrentes insultos a andaluces como vagos, a los gitanos... Campañas muy virales, pero, como todo lo de Twitter, efímeras.
