Local

Un niño y una niña

Si ella hubiera podido ser una niña, seguramente no habría tenido ocasión de enfrentarse a la durísima tarea de cuidar de un niño en estado de necesidad de atención. Si ese niño no hubiera tenido la mala suerte de encontrarse con una niña tan niña, no estaríamos lamentando el abandono que le llevó a la muerte.

el 15 sep 2009 / 19:19 h.

A Irene en circunstancia de espera de la decisión de la Justicia

Si ella hubiera podido ser una niña, seguramente no habría tenido ocasión de enfrentarse a la durísima tarea de cuidar de un niño en estado de necesidad de atención. Si ese niño no hubiera tenido la mala suerte de encontrarse con una niña tan niña, no estaríamos lamentando el abandono que le llevó a la muerte. ¡Pobre niño y pobre niña! Pobres los dos, en estado de abandono, él abandonado por ella, y ella abandonada de sí misma en su inconsciente comportamiento de niña que, como todas las niñas y todos los niños, no vio el peligro y cometió una imprudencia grave y fatal. La están juzgando. Dicen que cuando se dio cuenta de lo que había hecho, aunque sabía que el niño abandonado necesitaba ayuda, tuvo miedo de pedirla. Miedo de inmigrante a su falta de "papeles", miedo a ser detenida y expulsada de esta mierda de paraíso, en el que encontró a un pobre niño necesitado de ayuda y poco más. Dicen que la niña Irene, lo dicen los peritos, "tiene muchísimo miedo a todo lo que tenga que ver con la autoridad, de niña sufrió malos tratos por parte de su padre", fue violada a los 8 años por su tío, y por si fuera poco, su cociente intelectual está por debajo de la media. Pero según dicen también los peritos, ella "era consciente de que podía acarrearle un problema al niño" claro, los niños cuando hacen una fechoría saben lo que están haciendo, pero no saben el alcance que puede tener lo que hacen. El niño murió, pobre inocente en el dolor definitivo de su abandono. La niña abandonada de sí misma, sigue sufriendo el abandono absoluto de la suerte.

  • 1