El Guadaíra vive un buen momento. El río une ahora a su positiva evolución medioambiental las actuaciones que el Ayuntamiento tiene previsto llevar a cabo en su entorno, entre las que destaca un proyecto singular junto al Puente del Dragón: aquí se levantarán un gran parque infantil y un vivero.
El entorno del río Guadaíra, de una gran riqueza natural, es todo un privilegio para la ciudad que ahora va a aumentar su superficie. Una inversión de cuatro millones de euros permitirá doblar la superficie de parques de ribera, además de incrementar la dotación de los mismos. Tal y como señala el alcalde, Antonio Gutiérrez Limones (PSOE), se trata de crear un parque fluvial "que será un tesoro que muy pocas ciudades tienen la posibilidad de disfrutar".
La intervención ya se ha iniciado en la zona del Puente del Dragón con la rehabilitación de varios kilómetros de caminos. El proyecto prevé, justo a los pies del puente, un gran parque infantil de ocio con elementos decorativos similares a las teselas del puente del dragón, a lo que se unirá un gran vivero.
Rehabilitación. Las actuaciones continuarán por el parque de ribera y hacia la ciudad con la rehabilitación del molino de Pelay Correa, donde se recuperará el azud de forma que se consolide una lámina constante de agua, en la que se podrán hacer paseos en barca dispuestas en el embarcadero que se creará en la zona.
Los trabajos también conllevan la reforestación de todas las zonas, empleando las mismas especies que existen en la actualidad en los tramos de bosque en galería para garantizar su completa adaptación al clima y la perduración de las mismas.
La intervención en las márgenes del Guadaíra incluye también la recuperación del patrimonio asociado, principalmente los molinos del tramo urbano. En estos momentos ya se trabaja en varios de ellos con la recuperación de azudes y la consolidación de los edificios, al tiempo que se devuelve su curso natural al río. Esto hará que se reconstruyan los muros de refuerzo y se reparen los tamajares de los molinos de San Juan, Benarosa, El Algarrobo y El Realaje.
Incluso se construirá un nuevo edificio que recreará la fisonomía de los antiguos molinos, para ubicar en él un centro de interpretación del agua. Estará frente a la biblioteca que se construye en la actualidad y formará con ella un conjunto.
