La lluvia que cayó sobre la ciudad no consiguió empapar el grito silencioso de cientos de personas que se reunieron en el Muelle de la Sal con motivo del día internacional de la no violencia hacia las mujeres.
El monumento a la Tolerancia, a orillas del río, fue testigo de cómo personas de todas las edades y sexos pedían al unísono el cese de la violencia machista. Decenas de asociaciones de la ciudad han trabajado juntas para la realización de este acto para protestar por la violencia de género y reclamar una igualdad real y una educación para el respeto mutuo y también para homenajear a las mujeres muertas a manos de su pareja.
Desde el Polígono Sur llegó la Asociación Entre Amigos, que ya había hecho su particular conmemoración en el centro cívico del barrio, en el que los niños han construido un árbol de cartulina y en cada hoja han escrito un eslogan en contra de la violencia de género. "Lo más importante es el la educación, comenzar desde pequeños, educarlos en la igualdad", comentó una de las mujeres de la asociación.Las mujeres del la asociación Siempre Amigas también habían organizado varios actos. "Sólo pedimos la igualdad de géneros", comentó María, una de los miembros de la asociación.Voces silenciosas que de manera discreta llevan años luchando por los derechos y libertades de las mujeres. Cientos de manos que sostenían sus velas rojas, pidiendo e iluminando el único camino hacia la igualdad, el respeto mutuo en la pareja y el fin de la violencia de género.
