A. B.
El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, confirmó ayer que el Festival de Danza de Itálica, buque insignia de las artes escénicas en la provincia, volverá en su próxima edición -prevista para el mes de julio- a su lugar de origen, las ruinas romanas de Santiponce, de donde salió hace más de una década para itinerar por varios espacios de la capital y otros municipios sevillanos.
De este modo, como ya adelantó El Correo hace unas semanas, el Festival de Danza de Itálica, de carácter bienal, se programará este año en un terreno anexo al anfiteatro de Itálica, dentro del recinto arqueológico visitable -que gestiona la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía-, toda vez que continúen los trabajos de rehabilitación y adecuación del Teatro Romano, situado en el extremo opuesto a las ruinas.
"Las conversaciones entre la Diputación y la Consejería de Cultura están dando las últimas campanadas, pero no me cabe la menor duda de que el Festival de Itálica volverá a su espacio natural este verano", dijo tajante el presidente de la Diputación, que no quiso aclarar los términos del convenio que ambas administraciones firmarán "en breve".
De este modo y, satisfecho porque "el embrujo del recinto vuelva a arropar a este importante festival", el presidente de la Diputación quiso dejar claro que la ubicación para 2009 será, tan sólo, una situación transitoria hasta que culminen las obras del Teatro Romano. "Nuestra ambición última es instalarnos allí".
Mientras tanto, el arquitecto y escenógrafo sevillano Juan Ruesga ya trabaja en una estructura efímera que acogerá a unos 350 espectadores cada noche en las representaciones al aire libre de la muestra.
