Un hombre de 38 años, vecino de Coria del Río, se subió ayer encima del arco de la Barqueta en protesta por haber perdido su trabajo, lo que obligó a cortar el tráfico en los dos sentidos y a desviar las dos líneas de Tussam que cruzan el puente hasta que accedió a bajar en la escala de los Bomberos. La Policía lo detuvo por desobediencia a la autoridad, y el juzgado lo dejó en libertad pasadas las nueve de la noche. "No he conseguido mi objetivo porque lo que yo quería era un trabajo. Bueno, yo y cuatro millones y medio de parados", explicó Manuel Mendoza minutos después de quedar libre.
Los hechos se desencadenaron a las 8.05 horas, cuando varios testigos alertaron al 112 de la presencia del hombre en lo alto del puente. Según fuentes policiales, se habría subido a través de la pasarela, de madrugada, y una vez allí se había ayudado con una caña de pescar para asegurarse con un arnés que amarró alrededor del puente, donde había instalado también una tienda de campaña y donde tenía preparada una pancarta que no llegó a desplegar. "Tenía planeado quedarme una semana y desplegar una pancarta en la que le decía a Zapatero que ha sido muy torpe", explicó Manuel. "Pero me vine abajo y bajé, por mi propia voluntad", dijo el hombre, que fue aconsejado por dos psicólogos del cuerpo de Bomberos.
Manuel quería protestar por la situación de crisis del país, que lo ha llevado a él mismo al paro. La destreza para subir al puente se explica porque formó parte de los grupos especiales del Ejército y tiene formación en escalada, igual que en submarinismo y paracaidismo, según aclaró.
Efectivos de Bomberos se trasladaron al lugar en torno a las 9.00 horas y dos psicólogos del cuerpo lograron convencer lo de que bajara del puente, donde protestaba a unos 40 metros de altura. También acudieron varias dotaciones de Policía Local, que cortó el tráfico, y de Policía Nacional, que arrestó al hombre.
El hombre fue trasladado a la comisaría para tomarle declaración, y trasladado por la tarde al juzgado de guardia, que lo dejó libre. La detención se produjo por desobediencia grave a un agente de la autoridad y desórdenes públicos, según explicaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Sevilla.
El corte de tráfico en el puente duró dos horas y media, durante las que todos los vehículos tomarno itinerarios alternativos, incluidos los autobuses de las líneas C1 y C2 de Tussam, que cruzan la Cartuja, que se desviaron por el Alamillo.
