Moscú está de luto por las víctimas del atentado terrorista mientras intenta incriminar a Ucrania

El presidente ruso Vladímir Putin el pasado sábado decretó que el domingo 24 de marzo sería un día de luto en honor a todas las víctimas del atentado del Crocus City Hall, según los últimos datos del Comité de Investigación 137 de ellas fallecieron y hay 180 heridos de distinta consideración. Desde diferentes representantes del poder ruso se ha buscado activamente relacionar a Ucrania con el atentado. La portavoz del Kremlin María Zajarova apuntó en un comunicado en la web del Kremlin que “los ucranianos no dudan en cometer actos terroristas contra la infraestructura y los civiles pacíficos apoyados por Occidente”.

Volodímir Zelenski respondió a las acusaciones rusas a través de sus redes sociales. Acusó a Putin de permanecer en silencio durante un día, pensando como inculpar a Ucrania en lugar de dirigirse a sus ciudadanos. Además, añadió que el Ejército ruso comete “acciones terroristas” contra Ucrania y su población. “Han desplegado por el territorio de Ucrania a cientos de miles de terroristas, que están combatiendo a nosotros y no hacen caso de lo que está pasando en su país”, añadió en el mensaje.

La misma noche entre el sábado y el domingo Rusia bombardeó con misiles la zona de Lviv, al oeste del país, atacando infraestructura clave para Ucrania. El mismo ministerio de Defensa ruso confirmó que habían atacado con “armas aéreas de alta precisión y largo alcance y vehículos aéreos no tripulados a instalaciones de energía eléctrica, la industria de producción de gas y lugares de ensamblaje y prueba de embarcaciones no tripuladas”. Dichos ataques tenían por objetivo, según Moscú, desorganizar y destruir “equipos militares fabricados en el extranjero, así como armas transferidas a Ucrania por los países de la OTAN”. Se espera que en la próxima semana el Kremlin tomará más medidas, pues según informa el medio Rossiya 24 habrá reunión del Consejo de Seguridad de Rusia en la que participará el mismo Vladímir Putin.

Los culpables del ataque

Estado Islámico reivindicó el ataque desde el mismo viernes a través de su canal de Telegram. Las autoridades rusas han intentado por todos los medios vincular a Ucrania con el atentado, algo que Kiev negó por activa y por pasiva. Este domingo por la mañana el canal de Estado Islámico “Amak” compartió un vídeo del atentado en el que los atacantes recitan lemas islámicos y donde se puede ver como los terroristas decapitan y rematan a civiles heridos.

Por su parte, los medios estatales rusos han compartido vídeos donde algunos de los sospechosos admiten, con un ruso poco fluído, haber recibido pagos de medio millón de rublos (al cambio cerca de 5.000 euros) para asesinar a civiles en el Crocus City Hall. Entre las primeras informaciones de Rusia se decía que algunos de los sospechosos tenían nacionalidad tayika, algo que se ha negado desde Tayikistán. Según el propio ministerio de Exteriores del país centroasiático 2 de los señalados por Rusia no han abandonado territorio tayiko desde el noviembre del 2023, mientras que otro de los que salió como sospechoso en medios rusos afirmó estar en Samara, en la Rusia europea, durante todo el viernes y acudió por su propio pie a comisaría después de ver su fotografía en televisión, para aclarar lo sucedido.