El macronismo esquiva una nueva moción de censura a seis días de las elecciones europeas

Este lunes, los extremos franceses, tanto de la izquierda (LFI) como de la derecha (RN), han presentado dos mociones de censura contra el Gobierno, que ha podido esquivar nuevamente a tan solo seis días de las elecciones europeas. 

Con estas mociones, las dos oposiciones pretendían tumbar al “macronismo autoritario” por no haber consultado al Parlamento a la hora de decidir los recortes presupuestarios de 2024, que superan los 10 millones de euros. Además de impugnar "la aplicación de una austeridad sin precedentes", obligando al Gobierno a presentar una ley de finanzas “clara” para hacer frente a los 20.000 millones de euros que se necesitan para cerrar el presupuesto de 2024 y superar el déficit público. En 2023, Francia registró un PIB del 5,5%, frente al 4,9% que tenían previsto las autoridades.

El Gobierno de Macron en los últimos meses ha visto mociones de censura en su contra de todas las formas y colores. De hecho, el macronismo ha batido récords en este campo. La última presentada por la izquierda el pasado mes de febrero, contra el Primer Ministro, Gabriel Attal. “¡No escaparéis a la censura popular porque la votación del domingo será el principio del “apres-Macron”!”, gritaba este lunes en la Asamblea Nacional, el diputado rebelde Matthias Tavel a Gabriel Attal.

Aunque las dos mociones votadas no tenían mucho recorrido sin el apoyo de los republicanos: la primera presentada por la Francia Insumisa, obtuvo 222 votos, lejos de los 289 que se necesitan para la mayoría absoluta, y la segunda presentada por Agrupación Nacional, que no fue apoyada por las demás oposiciones, son un rasguño más para un gobierno debilitado que ha tenido que aprobar a golpe de decreto importantes reformas como la de las pensiones. 

Agrupación Nacional, por su parte, atacó a los diputados de Les Républicains (LR), acusando a la derecha de no apoyar estas mociones de censura y de “salvar la cabeza de Emmanuel Macron”.

Las oposiciones "buscan el desorden político y económico" , denuncia Gabriel Attal en FranceInfo. Precisamente, estas mociones buscan, además de protestar contra los recortes presupuestarios decretados en febrero, debilitar -aún más- a un macronismo a días de las elecciones europeas, en las que los sondeos ya dan por vencedora a la extrema derecha francesa, que cuenta con una progresión de un 33% de intención de voto. Muy por detrás, la mayoría presidencial con un 16% (-1), seguido de los socialistas con un 14,5%. 

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Francia en “deterioro presupuestario”

El pasado viernes, por primera vez desde 2013, la nota de la deuda soberana de Francia, pasó de “AA” a “AA-”, remarcando la situación de deterioro presupuestario a la que se enfrenta Francia en estos momentos. 

Ante este anuncio, el ministro de economía, Bruno Le Maire, declaró que descarta cualquier “aumento de impuestos” para el próximo año, mientras que la izquierda presiona al Gobierno para que apruebe un impuesto a los “ultra ricos” y a las grandes empresas con “superganancias”. 

Unas elecciones europeas marcadas por la revuelta de los chalecos verdes, la preocupación por la inseguridad y la migración, y los problemas de deuda, obligan al presidente Macron a utilizar su último cartucho; el de la palabra. El próximo jueves, el presidente Macron prevé dar una entrevista en la televisión francesa, France2, en la que se dirigirá a los franceses antes de ver la cara a las urnas.