Huw Edwards, expresentador estrella de la BBC, evita la cárcel por comprar fotografías sexuales de menores

El periodista Huw Edwards, uno de los presentadores estrella de la BBC hasta hace poco más de un año, ha sido condenado este lunes a seis meses de cárcel por comprar fotografías sexuales de jóvenes menores de edad. Una sentencia que ha sido suspendida por un período de dos años y que evitará el ingreso en prisión del expresentador siempre y cuando no cometa nuevos delitos o incumpla las condiciones fijadas por el juez. El tribunal considera que los delitos son “extremadamente serios” pero sostiene que el periodista no representa un peligro ni un riesgo para los menores. Edwards sí deberá participar en un programa de rehabilitación para delincuentes sexuales y pagar los más de 3.500 euros en costes judiciales.

El caso contra Edwards se abrió a finales del año pasado tras los indicios que apuntaban a que había pagado a Alex Williams, un joven de 19 años, por al menos 377 fotografías de menores entre diciembre de 2020 y agosto de 2021, de las cuales más de 40 eran “imágenes indecentes” de niños de hasta siete años de edad. El tribunal ha considerado probado que Edwards pagó a Williams 1.500 libras (cerca de 1.800 euros), además de hacerle un regalo por Navidad, a cambio de las capturas. “Está claro, por la apariencia de las conversaciones de WhatsApp recuperadas [por la policía], que gran parte del chat entre Alex Williams y el señor Edwards era de naturaleza sexual”, ha asegurado el fiscal Ian Hope. El propio Williams fue condenado a 12 meses de cárcel el pasado marzo por compartir las imágenes.

El objetivo de los pagos

La defensa, por su parte, ha asegurado que el propósito de los pagos no era obtener “imágenes indecentes” de los menores y ha insistido en que el periodista especificó que no quería fotografías de menores, a pesar de que en muchos vídeos recibidos no mostró ninguna queja al respecto. “[Edwards] reconoce la naturaleza repugnante de esas imágenes indecentes y el daño que se hace a quienes aparecen en ellas”, ha asegurado su abogado, Philip Evans. “Se disculpa sinceramente y deja claro que está muy arrepentido. También reconoce que ha traicionado la confianza y la fe inestimable de mucha gente”. El acusado estaba casado desde hace 30 años y tiene cinco hijos.

La imagen pública del expresentador se fue a pique en julio de 2023, cuando salió a la luz que había pagado importantes sumas de dinero a un menor a cambio de fotografías sexuales, en un caso revelado por el diario ‘The Sun’ que no está relacionado con la sentencia publicada este lunes. En ese momento fue la mujer de Edwards, Vicky Flind, quien reveló la identidad de su marido después de varios días de especulaciones en la prensa británica. Flind aseguró que su marido padecía “serios problemas de salud mental” e informó de su ingreso en un hospital, donde iba a permanecer en los “próximos meses”. Poco después, en noviembre de ese mismo año, el expresentador fue detenido por el caso juzgado este lunes.

La BBC le da la espalda

El escándalo revelado en julio y la posterior detención sacudió con fuerza a la BBC y al que había sido hasta entonces uno de sus presentadores estrella, quien había informado durante años de los principales acontecimientos en el país, entre ellos la muerte de Isabel II. “Estamos consternados por sus crímenes. No sólo ha traicionado a la BBC, sino también al público que confió en él”, ha asegurado la cadena pública británica a través de un comunicado. Edwards, quien había cobrado un sueldo cercano a los 500.000 euros el año anterior, renunció definitivamente a su cargo el pasado abril, tras cerca de cuatro décadas en la corporación. “Su reputación está ahora por los suelos”, ha asegurado el juez Goldspring en la lectura de la sentencia.

Goldspring ha dado por buenas las pruebas que demuestran que Edwards no recordaba haber visto las imágenes de los menores debido a sus problemas de salud mental y reconoce que el presentador sufre un “riesgo tangible” de suicidio después de décadas negando su sexualidad. Pero a pesar del deterioro de su salud mental, el magistrado ha dejado la puerta abierta a su recuperación. “Tengo la convicción de que no presenta un riesgo o peligro para el público en general, específicamente para los niños. Existe una perspectiva realista de rehabilitación”, ha sentenciado.