Climatología

El paso de tres tormentas en Filipinas se salda con al menos 23 muertos y 15 desaparecidos

Benbica, Gener y Pulasan afectaron a diferentes zonas del archipiélago filipino a lo largo de los últimos días

Un niño filipino en un centro de evacuados a raíz de las lluvias provocadas por la tormenta Gener en la norteña isla filipina de Luzón.

Un niño filipino en un centro de evacuados a raíz de las lluvias provocadas por la tormenta Gener en la norteña isla filipina de Luzón. / EFE/EPA/FRANCIS R. MALASIG

EFE

Al menos 23 personas perdieron la vida y 15 permanecen desaparecidas en Filipinas a raíz de las lluvias y corrimientos de tierra causados por el paso de tres tormentas tropicales, informan este jueves los servicios de emergencia. Las tormentas Benbica, Gener y Pulasan afectaron a diversas zonas del archipiélago filipino entre el viernes de la semana pasada y este miércoles y dejaron copiosas lluvias, especialmente en la sureña isla de Mindanao y la isla de Luzón, en el norte y donde se asienta Manila.

En su informe publicado hoy, el Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC, siglas en inglés) indica que 23 personas murieron, 13 resultaron heridas y 15 están siendo buscadas por los equipos de emergencia. La región de Mimaropa, en el oeste del país y que cubre la turística isla de Palawan, es la zona con más víctimas al contabilizar nueve muertos y doce desaparecidos.

Según los datos oficiales, más de 1 millón de personas se han visto afectadas por las tormentas, de las cuales sólo Gener tocó tierra en Luzón el martes, mientras Benbica y Pulasan, que posteriormente impactaron China, llevaron nubes de lluvia al territorio filipino.

Estos fenómenos meteorológicos fueron precedidos por la tormenta Yagi, que dejó 21 muertos en Filipinas a su paso por el país entre el 1 y 3 de septiembre. Posteriormente, en su rumbo a Vietnam, Yagi tomó fuerza hasta convertirse en el tifón más potente registrado en Asia este año y provocó inundaciones, riadas y corrimientos de tierra que causaron alrededor de 300 muertos en el país Indonchino, una decena en Tailandia, 4 fallecidos en Laos y unos 220 decesos en Birmania.