Israel amplía la evacuación del sur del Líbano mientras asesta un nuevo golpe contra Beirut

Las bombas israelíes sacuden el Líbano. Sin descanso ni tregua, los ataques aéreos hebreos siguen cebándonse en el sur y en Beirut. A su vez, la gravedad de la violencia también va en aumento. Durante la noche, el Ejército israelí ha bombardeado un edificio en el céntrico barrio de Bashoura de la capital libanesa. Allí, se encontraba el centro de rescate del Comité Islámico de Salud, afiliado a Hizbulá, donde al menos nueve personas, la mayoría de ellos paramédicos, han muerto y 14 han resultado heridas en el bombardeo contra la ciudad mediterránea desde el inicio de la ofensiva militar israelí. Mientras, el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, ha denunciado que 37 centros de salud han sido cerrados en el Líbano, incluyendo tres hospitales de Beirut, a causa de los ataques israelíes y 28 trabajadores médicos han muerto en las últimas 24 horas.

El día ha empezado con un ataque de madrugada que ha sacudido toda la ciudad y ha tenido lugar en el mismísimo corazón de Beirut. Luego, los ataques se han concentrado en los suburbios sureños de la capital. Esta área céntrica es una zona rodeada de edificios gubernamentales, como el Parlamento libanés o la oficina del primer ministro, y embajadas internacionales. El Instituto Cervantes, la institución pública española encargada de promover el aprendizaje de la lengua española, se encuentra a apenas medio kilómetro. Además, esta vez, a diferencia de la gran mayoría, el Ejército israelí no avisó a los civiles de la zona para que evacuaran. El impacto de los bombardeos ha sido tal que los cuerpos de algunas de las víctimas han salido propulsadas y han aterrizado en un cementerio adyacente. La Agencia Nacional de Noticias libanesa ha denunciado el uso de "bombas de fósforo prohibidas internacionalmente".

Durante los últimos 11 meses, Israel ha hecho uso de este tipo de bombas incendiarias en el resto del territorio libanés, pero, hasta ahora, no había llegado a usarlas en la capital libanesa. Este jueves también se han registrado ataques con fósforo blanco y ataques de artillería en Ramiyah y Beit Lif, en la zona de Bint Jbeil, a menos de cuatro kilómetros de la Línea Azul que separa Israel y el Líbano. Hizbulá ha dicho que sus combatientes han frustrado "un intento de las fuerzas enemigas israelíes de avanzar hacia la Puerta de Fátima", en la frontera de Kfar Kila, con proyectiles de artillería. Según las autoridades israelíes, ya son nueve las bajas en los tres días de invasión terrestre del sur del Líbano después de que otro soldado perdiera la vida en los combates este jueves. Hizbulá, en cambio, aseguró que solo este jueves ha matado a 17 efectivos del Ejército hebreo.

Evacuaciones de población civil

En el sur del Líbano, a su vez, el fuego israelí continúa. El Ejército hebreo ha pedido a los residentes de 25 localidades del sur del Líbano que las evacuaran antes de la una del mediodía, y se dirigieran al norte del río Awali, a 65 kilómetros de la frontera y al norte de la ciudad de Sidón. En los últimos tres días, las autoridades militares israelíes han pedido la evacuación de 70 localidades. A su vez, un soldado libanés ha muerto en un ataque israelí en el sur del país, según han informado las fuerzas armadas libanesas. Otro soldado ha resultado herido y cuatro trabajadores de la Cruz Roja Libanesa también mientras realizaban operaciones de rescate en Taybeh, en la zona de Marjayoun, donde se encuentra la base militar española. A su vez, las Fuerzas Armadas Libanesas han denunciado que otro de sus soldados ha muerto después de que "el enemigo israelí atacara un centro del Ejército en la región de Bint Jbeil", anunciando que "los miembros del centro respondieron a las fuentes de fuego". Se trata de la primera vez que el Ejército libanés responder en un año a disparos israelíes.

Mientras la población civil libanesa continúa su éxodo forzado bajo las bombas –ya son 1,2 millones de personas obligadas a abandonar sus hogares–, el Ejército israelí ha acusado a Hizbulá de contrabando de armas a través del cruce oficial de Masnaa en la frontera entre el Líbano y Siria. El ministro de Obras Públicas, Ali Hamiyeh, ha negado en una rueda de prensa esta acusación, asegurando que numerosas ramas de las fuerzas de seguridad, así como el Ejército libanés, lo inspeccionan. Israel, de alguna forma, está tratando de imponer un bloqueo militar contra Hizbulá, al controlar quién aterriza en Beirut y quién usa las rutas entre el Líbano y Siria, mientras el Ejército sugiere que no se use el paso de Masnaa para transportar equipos de combate.

Ataques contra Siria

También se han registrado ataques contra territorio sirio, en la capital Damasco y en el puerto de Latakia, en otro intento israelí más de acabar con las capacidades militares del grupo chií y de sus aliados. En el ataque contra un edificio en Damasco, además de tres civiles, entre ellos una periodista, han muerto un asesor militar de la Guardia Revolucionaria de Irán, el yerno del exlíder de Hizbulá, Hasán Nasralá, Hasán Jaafar al Qassir, y su hermano, que es el responsable de la transferencia de armas de Irán al Líbano. Este viernes el ministro de Exteriores de Irán visitará el Líbano.

Desde el comienzo de las hostilidades, los ataques de Israel en Líbano han acabado con la vida de casi 2.000 personas. Israel e Hizbulá llevan enfrentados desde el inicio de la guerra contra la Franja de Gaza el pasado octubre, pero la violencia aumentó a un nivel sin precedentes desde 2006 hace dos semanas, cuando las fuerzas israelíes iniciaron una campaña de bombardeos que ha arrasado localidades y pueblos enteros.