Alcalá del Río podrá celebrar su Semana Santa con normalidad

Han sido meses de incertidumbre por unas obras que dilataron su inicio en el epicentro devocional de Alcalá del Río, la capilla de San Gregorio. Pero este martes ha llegado la esperada noticia. Las hermandades de la Vera-Cruz y la Soledad han anunciado que la sede que comparten estará disponible para realizar desde ella sus respectivas estaciones de penitencia.

Ha sido en la tarde de este martes cuando se han hecho públicos sendos comunicados por parte de las dos corporaciones, con idéntico texto, donde se indica que “las salidas procesionales de ambas hermandades en esta Semana Santa de 2023 se realizarán desde la Real Ermita de San Gregorio, salvo causas de fuerza mayor”.

El anuncio se ha dado a conocer tras la reunión mantenida entre el párroco, José María Campos, representantes de las dos hermandades y la dirección facultativa de la obra, que está llevando a cabo la empresa Construalia. En esta se ha constatado la conclusión de la primera de las fases de las obras de restauración y rehabilitación de la capilla del Patrón alcalareño, donde las hermandades de la Soledad y la Vera-Cruz tienen su sede canónica.

El escrito, además de dar gracias a Dios, a la empresa constructora y al equipo técnico de la obra por “la labor desarrollada durante esta primera fase”, emplaza a “próximos comunicados” para informar “sobre el desarrollo y organización de las respectivas salidas procesionales”. Concluye la información contando con la “buena disponibilidad y colaboración” de las hermandades y sus hermanos “para el buen desarrollo de la Semana Santa de 2023”.

Este comunicado se ha hecho público coincidiendo con el tercer aniversario de la declaración del estado de alarma, del decreto del confinamiento domiciliario y – por parte de las hermandades alcalareñas – de la suspensión de los cultos y procesiones de Semana Santa. Tres años después, y con una semana mayor ya vivida de forma normal, este comunicado trae mejores noticias para los cofrades de Alcalá del Río, ya que las hermandades se estaban viendo obligadas a plantear alternativas a la salida procesional ante la falta de certeza por poder contar con su sede para ello.

La capilla de San Gregorio de Osset es un templo de estilo mudéjar, de una sola nave, fruto de la ampliación que los Reyes Católicos realizaron de la antigua ermita del Patrón e hijo de la localidad. Cuenta la tradición que la ampliación fue el agradecimiento del rey Fernando el Católico por el milagro concedido por el santo ilipense – el monarca quedó sanado de los fuertes dolores de cabeza que le aquejaban al introducir la testa en el sepulcro de San Gregorio –, dotando al templo de privilegios por real cédula firmada en 1486. En el muro del evangelio se abren dos capillas, donde residen las hermandades de la Vera-Cruz y de la Soledad.

Ante el mal estado de conservación, y tras restauraciones de la techumbre y la solería en el año 1991 y de la bóveda del presbiterio en 1999, en el año 2019 se procedió a remozar la fachada, quedando pendiente la rehabilitación integral del interior. En los meses y años sucesivos el deterioro del templo ha sido más que evidente, incluso con desprendimientos en las paredes.

De forma previa al inicio de las obras, y como inicio de este exilio temporal, la hermandad de la Soledad se trasladó hasta la parroquia de Santa María de la Asunción el 15 de septiembre del pasado año, al término de la función de los Dolores Gloriosos en honor a su titular mariana. Desde entonces, recibe culto en un alta provisional erigido ante el retablo de la Virgen de Rocamador en el templo mayor alcalareño. La hermandad de la Vera-Cruz, por su parte, mantiene el culto a sus imágenes en su casa hermandad, ubicada en la calle Real de Castilla, a donde fueron trasladados sus titulares el 30 de octubre. El templo fue clausurado en noviembre de 2022, comenzando las obras en febrero de 2023.

En la primera fase se ha intervenido principalmente en los muros y paramentos interiores, procediéndose al saneado de las paredes y a la renovación de las instalaciones y del cableado de electricidad, megafonía e internet.

Tras la conclusión de estas primeras obras, la capilla será sometida a una exhaustiva limpieza, que dejará la nave en condiciones apropiadas para albergar a las imágenes en sus respectivos pasos a la espera de su salida procesional – el Jueves Santo la hermandad de la Vera-Cruz y el Viernes Santo la hermandad de la Soledad –.

En la segunda fase, ya después de la Semana Santa, se concluirá la intervención estructural y se restaurarán los altares de San Gregorio y de la Virgen de los Remedios, por lo que las hermandades deberán volver nuevamente a los lugares donde han estado residiendo de forma provisional.