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El vicepresidente del Consejo, Antonio Piñero, felicita a Alberto García Reyes. / José Luis Montero. -
Alberto Garcia Reyes (c), el vicepresidente del Consejo (i) y el presidente Joaquín Sainz de la Maza (d). / José Luis Montero. -
Alberto Garcia Reyes se abraza al delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores Juan Carlos Cabrera. / José Luis Montero. -
De dcha. a izda. Alberto Garcia Reyes; el vicepresidente del Consejo, Antonio Piñero; el presidente, Joaquín Sainz de la Maza; y el delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores Juan Carlos Cabrera. / José Luis Montero. -
A la izquierda, el vicepresidente del Consejo; en el centro, el periodista Alberto García Reyes; y la derecha, el presidente Joaqiín Sainz de la Maza. / El Correo
«En mi pregón me agarraré a Dios y a la Esperanza»
La primera sensación de Alberto García Reyes, pregonero de la Semana Santa de Sevilla 2017, fue «de gratitud al Consejo y a Sevilla» porque este es «un regalo o un sueño» para «cualquier sevillano que se sienta sevillano y sea creyente y cofrade»
Estaba en la basílica, a punto de participar en una mesa redonda del encuentro de hermandades de la Esperanza Macarena, cuando Alberto García Reyes (Dos Hermanas, 1979) recibió la llamada del Consejo que le comunicaba su nombramiento como pregonero de la Semana Santa de 2017. La primera sensación fue «de gratitud al Consejo y a Sevilla» porque este es «un regalo o un sueño» para «cualquier sevillano que se sienta sevillano y sea creyente y cofrade». La siguiente reacción fue «suspirar» por «todo lo que te viene, un susto muy grande después del pregón del año pasado que hizo historia». Precisamente el autor del anuncio de 2016, Rafa González Serna, le acompañaba en estos primeros minutos de pregonero oficial de Sevilla. «Me ha dado un abrazo y me ha llevado delante del Señor de la Sentencia y nos hemos dado un abrazo. No hay oro en el mundo para pagar este gesto. Se lo agradezco públicamente», ha confesado este joven periodista y escritor, adjunto a la dirección de ABC, este sábado por la mañana en la sede del Consejo de Cofradías donde, como ha bromeado, se ponía por primera vez al otro lado en una rueda de prensa. Allí, tras ser recibido entre aplausos por los miembros de la institución cofradiera, García Reyes echó mano de un dicho relacionado para su profesión para avanzar por dónde irá su oratoria en el teatro de la Maestranza, el próximo 2 de abril: «Un periodista no tiene que gastar libreta y boli sino suelas de zapatos. Y eso es lo que voy a aplicar en mi pregón: No pienso dejarme nada atrás, desde el Viernes de Dolores al Domingo de Resurrección, y pienso gastar mucha suela de zapato». Eso sí, avanzó también que como «hijo de la Esperanza, más que al atril se agarrará a Dios y a la Esperanza para encontrar en el baúl las palabras para despertar a los que siguen dormidos y salgan a las calles de la ciudad a ver a Dios». En este «hablar de Dios según Sevilla», este cofrade vinculado a los Gitanos de Utrera, la Macarena y las Siete Palabras, ha insistido en que va a «disfrutar seguro» porque va a «escribir soñando» e «intentar pasarlo bien» para «sentir y hacer sentir, pensar y hacer pensar y creer y hacer creer». De hecho, reconoció que las primeras horas como pregonero las iba a pasar disfrutando del día esplendoroso de este sábado, «con el traslado de la Paz, la extraordinaria de Santa Ana, la Feria de San Miguel...» No obstante, al pregonero ya le han llegado las primeras sugerencias. Es la que le han hecho cariñosamente sus dos hijos pequeños –de nueve y cinco años–, que al telefonear para comunicarles la designación le han solicitado lo siguiente: «Bueno, papá habla de Nuestro Señor [por las Siete Palabras] y no hables solo de la Esperanza». Sobre la posibilidad de incluir guiños musicales en su texto, García Reyes fue directo: «Me gusta todo lo que sea bueno. No le pongo puertas al campo nuca». Eso sí, también ha aclarado que las innovaciones musicales de los últimos años han sido muy buenas pero que, de momento, no tiene en la cabeza ninguna innovación pero que tampoco es inmovilista ni revolucionario. «Todo lo que esté hecho con sensibilidad, ha ser siempre pensando en Dios, todo cabe». El presidente del Consejo, Joaquín Sainz de la Maza, le recordó cariñosamente que «ahora tienen que elegir, como todos los pregoneros, a su apoderado, la persona que le ayudará con la agenda»; mientras que el delegado municipal de Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, alabó el nombramiento al asegurar que se trata de «un gran profesional» y «una gran persona».