Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder ante Caifás ya se encuentra a la derecha de la imagen del sumo sacerdote. La Hermandad de San Gonzalo ha celebrado este viernes a las 21 horas el acto de subida de su Cristo al paso, tras realizarse el pasado jueves la mudá de dicho paso a la Parroquia de San Gonzalo. Se trata de una ceremonia que tenía lugar tradicionalmente el Martes de Pasión pero, tras el impasse de la pandemia, en 2022, se adelantó al sábado anterior, víspera del Domingo de Pasión. Así, este año se ha anticipado una jornada más.
En cuanto al acto, que anualmente congrega a muchos hermanos, feligreses y cofrades, la parroquia se llenó como siempre y el público llegó hasta la mitad de la plaza. Para que las personas que pretendían ver la subida del Cristo desde la calle pudieran hacerlo, se desplazó el misterio unos metros hacia la nave principal del templo. El Señor, obra de Luis Ortega Bru concebida entre 1975 y 1976, viste la túnica morada y bordada en oro por José Librero, con la que saldrá el próximo Lunes Santo, al igual que hizo el del pasado año cuando la estrenó. El Cristo del Soberano Poder fue trasladado por los hermanos mayores del Santo Entierro, la Esperanza de Triana, el Cachorro y las Cigarreras, entre dos filas de cirios encendidos y sostenidos por miembros de la junta de gobierno -además de Mateo Domingo González Gago y José Fernández López, anteriores hermanos mayores de San Gonzalo-, hasta el elevador donde se colocó la imagen.
Antes de comenzar a ascender se le cantó una saeta. Intervino musicalmente también la recién formada escolanía de la hermandad. Al llegar arriba del paso, los priostes, Francisco Barrio y Leonardo Risco, situaron al Señor en su posición definitiva junto a Caifás. Entonces se entonó una segunda saeta. Para finalizar, como sucede en cada cita destacada de la corporación radicada en el Barrio León, se cantó la Salve a Nuestra Señora de la Salud. En el vídeo que encabeza esta crónica, realizado en directo por La Mercería Producciones, se puede disfrutar de nuevo de la subida del Señor en Su Soberano Poder a su paso de misterio.