-
Víacrucis de Itálica. / Juanmi Vega
Antiguamente, en el Anfiteatro de Itálica los romanos compartían su tiempo en espectáculos de gladiadores, y ahora en el mismo lugar, el Víacrucis penitencial se ha convertido en una de las actividades más esperadas por los sevillanos. Desde 1990, es promovida y organizada por la Hermandad del Rosario de Santiponce, a la que se sumaron otras trece Hermandades para ser partícipes de esta inigualable experiencia. Cada año estrena el periodo cuaresmal transcurriendo por la cuna de Adriano y Trajano, y simbolizando el Cristianismo.
Este sábado día 29 de febrero entre piedra, leyenda y naturaleza, será posible apreciar toda la grandeza y esplendor del imperio romano a los pies del Jesús Nazareno, tallada por José Arce, que hace florecer cada año el Evangelio en las ruinas milenarias. Estará acompañado de multitud de fieles que portan antorchas, cánticos gregorianos y música barroca de la Capilla Musical “Ntra. Sra. Del Rosario” que harán de Itálica un paisaje todavía más especial.
Esta manifestación religiosa y cultura fue reconocida como “Acto de Interés turístico Nacional de Andalucía” en 2001 por la Junta de Andalucía. Después de estos 29 años ha arraigado profundamente tanto en Santiponce como en la mayor parte de la provincia de Sevilla.
El horario previsto para el desarrollo de esta edición es el siguiente:
18:15 h. – Celebración Eucarística previa al acto.
19:30 h. – Salida procesional del cortejo hacia la Ciudad Romana de Itálica.
20:15 h. – Entrada en el Conjunto Arqueológico de Itálica (puerta principal).
20:30 h. – Entrada en el Anfiteatro Romano y comienzo del Víacrucis.
21:45 h. – Finalización del Víacrucis en la arena del Anfiteatro.
22:15 h. – Salida del Conjunto Arqueológico de Itálica subiendo por el Cardo Máximo, arteria principal de la ciudad.
22:30 h. – Oración, meditación y responso al paso por las puertas del Cementerio Municipal.
23:15 h. – Entrada en el Templo y cierre del piadoso acto.
Este año, la entrada al Conjunto Arqueológico de Itálica se llevará a cabo por la puerta principal. Es un acto único, donde los asistentes disfrutarán de un viaje al pasado paseando por el trazado de lo que fueron las calles, las casas y los objetos de arte de los habitantes romanos de la época.