Los Javieres repone al culto a su Inmaculada

Después de haber estado retirada del culto casi todo un año, el pasado jueves 17 de noviembre, la Hermandad de los Javieres repuso en su altar de la Real Parroquia de Omnium Sanctorum la bendita imagen de María Inmaculada, titular de esta corporación del Martes Santo y cuya talla ha sido sometida a una serie de labores de mantenimiento y conservación, habiéndose llevado a cabo por el taller de restauración de bienes culturales, según indica en sus redes la junta de gobierno que preside como hermano mayor José Antonio Oliert.

La efigie está esculpida en madera por el escultor Escamilla sobre el año 1942, y su tamaño es menor al natural. Esta imagen llegó a la Hermandad de los Javieres gracias a su fundador, el recordado padre Trenas, puesto que fue precisamente él quien la encargó de manera personal. La Inmaculada es cotitular de esta cofradía desde 1999, y desde el 6 de marzo de 2000 se encuentra en su actual altar, que se estrenó gracias a la autorización por parte del Palacio Arzobispal de incluir a la Inmaculada en el título corporativo. Con anterioridad, se hallaba en el salón de actos de la casa-hermandad.