Un ‘jerusalén’ al estilo sevillano en Lillo

El párroco de esta localidad toledana recrea la Pasión con las imágenes titulares de Sevilla

15 mar 2017 / 21:22 h - Actualizado: 16 mar 2017 / 09:08 h.
"Cofradías","Cuaresma"
  • Uno de los misterios inspirados en Sevilla. / El Correo
    Uno de los misterios inspirados en Sevilla. / El Correo

La Cena, Monte-Sión, San Benito, Las Cigarreras, el Señor de las Penas de la Estrella, el de la Salud de los Gitanos, el de las Tres Caídas de Triana, el Cerro, Santa Marta y el Resucitado o versiones muy parecidas forman parte de la recreación de la Pasión, Muerte y Resurrección que el cura de Lillo, un pueblo de Toledo, ha montado en su parroquia, la iglesia de San Martín Obispo, y que ha dado la vuelta a España por las redes sociales gracias a dos vídeos hechos por el propio párroco para mostrar a sus feligreses desplazados a Madrid esta peculiar iniciativa.

En octubre pasado el sacerdote Jesús Torresano Perea, «para que no se juntara con el montaje del belén», fue comprando las figuritas en marmolina inspiradas en las imágenes titulares de estas hermandades sevillanas en tiendas especializadas; en casa, las fue pintando y recreando las escenas de los misterios «según Dios me dio a entender», porque nunca ha visto los pasos en la calle, «sólo por internet», aunque reconoce a la Esperanza de Triana y la Macarena sin titubear. De hecho, admite, «son figuras sevillanas porque no las hay de otro sitio, salvo la piedad».

El Miércoles de Ceniza, después del montaje con la ayuda de los belenistas del pueblo, el cura bendijo este belén pasionista o jerusalén –por adaptar la nomenclatura– y rápidamente subió al perfil de Facebook de la parroquia los dos vídeos: «Uno con música y otro con el relato de la Pasión». También lo compartió con algunos amigos a través de Whatsapp y así ha dado la vuelta a la geografía española. «La iluminación no es muy allá. Aquí todo es rústico y artesanal, pero ya iremos mejorando».

Torresano Perea, que asegura que su montaje no tiene parecido en su comarca aunque cree que sí en algunas parroquias andaluzas, explica que se ha inspirado en el belén perpetuo de los dominicos de Ocaña, que tienen montado durante todo el año una recreación, con dioramas, de la vida de Cristo, desde su nacimiento a la Resurrección, «con efectos especiales», «una historia de la Salvación».

En cualquier caso, «se ha hecho con la intención de que sirva de catequesis para los niños, pero son los mayores los que más lo están disfrutando», añade. Este «belén del cura», como lo llaman sus vecinos, permanecerá expuesto a las miradas y «emociones» de sus feligreses hasta pasada la Semana de Pascua y servirá como complemento a las celebraciones de la Semana Santa: la procesión infantil del Domingo de Ramos, los oficios, el viacrucis de la mañana del Viernes Santo, el Santo Entierro de la tarde del Viernes, en la que participa el patrón, el Cristo de las Injurias, y el Encuentro tras la vigilia.