La Junta no da una cifra sobre cuántos de los 15.000 sanitarios se quedarán

El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, ha señalado en el Pleno del Parlamento que "mantendrán el máximo de contratos, sobre todo a nivel de atención primaria" y que "están estudiando" la proyección que puede haber de cara al plan de alta frecuentación, la vacunación de gripe o la tercera dosis contra el Covid-19, "garantizando siempre el personal suficiente para mantener la óptima calidad asistencial".

Así se ha pronunciado Aguirre ante una pregunta planteada por la socialista Beatriz Rubiño, quien ha preguntado al consejero si Salud renovará a todos los profesionales cuyos contratos vencen el 31 de octubre y le ha instado a responder "sí o no" y a que "no dé la vuelta y se ampare en sus chascarrillos porque la sanidad pública se merece una respuesta veraz, los profesionales la verdad y los andaluces un responsable de Salud que los mire a los ojos y les diga sí o no, que les atiendan de manera presencial y que tengan tiempo suficiente para ello".

"Eso mismo de lo que se quejaban con el gobierno anterior y ahora son incapaces de hacer nada", porque "tienen una hoja de ruta de demolición de todo lo que suene a público en esta tierra", para añadir que la sanidad privada "solo se la pueden permitir unas cuantas familias, las mismas que van a recibir las rebajas fiscales que tan alegremente aprueban en este Parlamento".

Ha afirmado que las derechas en la Junta "no apuestan por la atención primaria, ni por la atención presencial en nuestros centros de salud", y al final todo "es reducir plantillas, no renovar contratos y precarizar al personal", al tiempo que ha criticado que hoy en día conseguir una cita presencial "es una odisea". "Los pacientes necesitan ver a su médico, que las pruebas se agilicen y acabar con las listas de espera; en definitiva, hacen falta esos 15.000 profesionales que están esperando la renovación de sus contratos, porque van a colapsar de nuevo la atención primaria y están colapsando las urgencias".

Por su parte, Aguirre le ha respondido que "no son 15.000 sino 20.030" y ha afeado a Rubiño su discurso "cutre entre pública y privada, de buenos y malos, anclado en el ostracismo", para agregar que las voluntades políticas "se manifiestan en los presupuestos", toda vez que ha señalado que ofertarán contratos "en función de la evolución de la pandemia y las necesidades asistenciales del sistema sanitario público", y, sobre todo, "apostando por la atención primaria".

Ha afirmado que la mayoría de estos contratos son Covid y ha recordado que Andalucía "está a nivel cero", pero "ahora vienen la campaña de vacunación de la gripe y la tercera dosis del Covid, y hay que optimizar al máximo el tiempo y los recursos humanos", ha afirmado, para incidir en que "apoyarán de forma importante la atención primaria", donde han puesto en marcha una nueva estrategia.

La puerta principal del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla ha servido de escenario este jueves a la movilización convocada por CCOO Sevilla con el objetivo de reclamar al Servicio Andaluz de Salud (SAS) la renovación del personal sanitario temporal, unas 15.000 personas que terminarían su contrato a 31 de agosto, según señala el sindicato.

En este marco, Luis González, del Sindicato de Sanidad de CCOO Sevilla, ha puesto en valor que alrededor de «300 trabajadores del Hospital Macarena se han concentrado a la puerta del centro para exigir esta renovación porque en la sanidad no sobra nadie». «Nos hemos dejado con la pandemia a mucha gente sin atender. Sin estos compañeros los hospitales y los centros de salud no pueden funcionar», recalca en un audio recogido por Europa Press.

Por lo tanto, pide a la Junta de Andalucía que «se dejen de dilaciones y dejen de excusas». «No sólo no sobra nadie en la sanidad, sino que necesitaríamos más gente para atender a la población», afirma, tras informar de que las movilizaciones continuarán la próxima semana con una concentración ante el Hospital Virgen del Rocío.