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Actualizado: 09 may 2020 / 04:00 h.
  • Cristina Conejero (derecha) celebrando la victoria en el EBT del año pasado.
    Cristina Conejero (derecha) celebrando la victoria en el EBT del año pasado.

Cristina Conejero Galán es una nazarena de 29 años que ama el balonmano. Más concretamente la versión sobre arena del deporte, al que ha dedicado más de 20 años de su vida y en el que junto a su hermana Patricia se han ganado un hueco como las “hermanas Conejero”. En su palmarés destacan dos campeonatos del EuroHandball Beach Tour, dos primeros puestos en la Champions Cup en el apartado de clubes y una medalla de bronce con la selección en los World Games de 2017.

Este año 2020 no ha podido -y ya no podrá- competir con su equipo el AM Team Almería, pero sumará a su lista de títulos el haber participado en la contención del coronavirus en el Hospital Virgen del Rocío como auxiliar de enfermería. Empezó a trabajar en el hospital en febrero, poco antes de que se desatara el brote, y cuando esté llegó le toco hacerle frente en la UCI del hospital.

Pregunta: ¿Cómo han sido estos meses de lucha contra el virus?

Respuesta: Aquí la cosa no ha estado tan mal, no ha pasado como en Madrid o en Cataluña. Y como experiencia ha sido muy emocionante por el trato que hemos desarrollado los compañeros y los pacientes en esta situación tan diferente. Se sufre porque hay mucha tensión en el ambiente, pero también lo hemos celebrado mucho cuando un paciente que parecía imposible que saliera adelante lo ha conseguido.

P: Y en el plano deportivo, ¿qué efectos ha tenido el Covid-19 en el balonmano?

R: La federación ha suspendido la temporada en pista y como consecuencia este año no va a haber descensos, solo ascensos. El año que viene todas las competiciones de balonmano tendrán más equipos participando en ellas. Pero yo me he retirado de la competición en pista porque el verano pasado me lesioné por segunda vez el cruzado y correr sobre cemento no es lo mejor para la rodilla.

P: Entonces este año no has podido competir.

R: Eso es. Ni voy a poder porque también se han suspendido las competiciones de balonmano playa. Me duele mucho porque el balonmano no es como el fútbol, es un deporte que sigue la gente que le gusta y esta situación se agudiza si hablamos de su versión de playa. Esta temporada teníamos muchas ganas porque podíamos revalidar los tres títulos del año pasado: el EBT, la Champions Cup y el Arena Handball Tour pero se ha suspendido todo por el virus.

P: ¿No hay formas de jugar los partidos? Con menos aforo, quizás retrasando las fechas de las competiciones...

R: Como personal sanitario creo que si jugáramos sería una irresponsabilidad. Es verdad que todo el mundo lo está pasando muy mal y pensábamos que se iba a poder jugar al menos uno o dos torneos. La suspensión de todos ha sido un palo bastante grande. Y retrasar las competiciones es imposible porque las temporadas de balonmano playa y pista no pueden pisarse ya que muchos jugadores participan en los dos deportes con distintos equipos. Hay gente que juega en pista para mantenerse en forma para llegar a tope a la temporada de playa.

P: Con la temporada acabada antes siquiera de empezar, ¿cómo vais a mantener la forma física?

R: Bueno como te comentaba antes, la mayoría de los jugadores compiten en pista para mantenerse hasta el verano. Yo como he estado lesionada he estado haciendo trabajo de rehabilitación en el gimnasio, pero también tuve que cortar cuando se decretó el estado de alarma. Como equipo vamos a intentar hacer una concentración entre nosotras. Es algo que hacemos normalmente todos los años, nos juntamos un fin de semana antes de viajar al lugar en el que se celebre el torneo. Pero este año lo haremos, aunque sea para reunirnos y poder preparar algo entre nosotras.