Ya son dos años durante los que tanto Sevilla como el resto de las ciudades se han venido adaptando a las medidas de seguridad e higiene pertinentes, y aunque la situación parece ser más favorable, aun no se puede bajar la guardia.
Para el Cabildo Catedral de Sevilla, esto es una prioridad y por eso, el 3 de junio de 2021, la celebración del Corpus Christi, se verá condicionada por algunas medidas de seguridad que garanticen la prevención e higiene necesarias.
Como han detallado, ese jueves se abrirán las puertas de la catedral hispalense a las 9.00 de la mañana para todo aquel que quiera asistir a la Misa que presidirá el Administrador apostólico, monseñor Juan José Asenjo, en el Altar del Jubileo.
El aforo, por su parte, estará limitado al 50%. Es decir, 611 plazas disponibles. Para ello, el Cabildo ha vuelto a verse en la obligación de reducir las representaciones de instituciones de Sevilla y de la Archidiócesis.
No habrá procesión este año del Santísimo Sacramento por las calles de la ciudad. Solo por las últimas naves del interior del templo metropolitano. Un cortejo que quedará reducido al Consejo de Cofradías, la Junta de Gobierno de la Archicofradía Sacramental del Sagrario, el Cabildo Catedral, el vicario general, el Administrador apostólico y las primeras autoridades con el fin de evitar posibles aglomeraciones.
Sin embargo, al contrario que el año pasado, la Octava posterior al Corpus Christi de adoración, aunque sin baile de Seises tradicional, sí se celebrará.