Adara Molinero es participante de la nueva edición de Supervivientes. Como de casi todos los realities que emite Mediaset. Vive del cuento desde hace años y, durante algunas semanas, tendrá que vivir como pueda. Vuelve a la televisión para facturar y poder estar tranquila los próximos meses. Un clásico. Habrá que esperar para saber si su falta de inteligencia y cultura se esconde detrás de una astucia que suele funcionar bien en este tipo de programas, una astucia que Adara ha desarrollado para poder sobrevivir estos años atrás. Si esta edición gana la inteligencia, en dos o tres semanas estará de vuelta.
Otro de los concursantes es un tal Diego Pérez. Este sujeto participó en alguna de las ediciones de La Isla de las Tentaciones. Es conocido en las redes sociales (en las que tiene un importante número de seguidores) como ‘James Lover’. Esto promete; no me digan que no es una fantasía que estas cosas sean reales. El señor Lover ha nominado a Adara a las primeras de cambio, con dos narices. Sabe que la señora Molinero trae detrás un ejército de seguidores, pero se ha atrevido con ella. Irá a la calle ya mismo por insensato aunque algunos dicen que este gesto será lo que le salve. Ya veremos. De momento, tendrá que vivir esta semana nominado.
La presentadora Laura Madrueño (la mujer del tiempo en Tele 5) ha comenzado muy bien. Incluso nos ha obsequiado con unas imágenes bajo el agua de una belleza maravillosa. Ella bucea mucho y publica reportajes en las redes junto a su pareja. Bien de nervios, bien de rapidez, bien de naturalidad. Lara Álvarez será olvidada en unos días.
Esto es lo más destacable del primer programa de la edición. Será más de lo mismo y, de momento, lo único que se constata es que la creatividad no será la protagonista en las galas. Es lo mismo con distintas caras. Supervivientes funciona bien y este año, a pesar de contar con unos participantes desconocidos y casposillos, volverá a ocupar un lugar de privilegio en la parrilla.