Un Observatorio que nace con los objetivos de analizar el impacto que este nuevo ecosistema va a tener en la relación entre personas y economía digital, así como promover la creación de redes de colaboración para el desarrollo de esta nueva dimensión de Internet. Un entorno virtual, que si bien no es nuevo, sí lo es su aplicación a nuestra sociedad a través de los NFT o tokens, archivos digitales cuya propiedad puede ser registrada gracias a la tecnología Blockchain.
En este primer encuentro se han tratado las acciones a realizar por el Observatorio TIC del Metaverso, entre las que destaca el seguimiento continuo de todas las novedades y acontecimientos en torno al metaverso, con una especial mirada y atención hacia todo lo relacionado con la región andaluza. Para el desarrollo de esta labor, se ha previsto la creación distintas áreas y grupos de trabajo, que mantendrán un diálogo constante con los expertos que lideran esta aplicación y el desarrollo de la misma. Además, el Observatorio asumirá la tarea de analizar las tendencias y particularidades que pueden generarse en cada una de las industrias presentes en el metaverso, e impulsará la convocatoria de encuentros que contribuyan a la detección y generación de nuevos negocios en esta dimensión.
El Observatorio TIC del Metaverso está liderado por la directora de derecho digital y negocio tecnológico de Montero Araburu, Lola Carranza y la empresaria y directora del diario Cibersur, Victoria Cabrera junta a ellas lo constituyen e impulsan Carmen Rodríguez Quirós, Tamari Sánchez, Carmen Baena, María José Escalona, Elena Fernández, Carmen Bernáldez, Chary Tiscar , Eva Ruiz, Loreto del Valle, María Gil, Marisa Marchante, Charo García, Mabel Carmona, María Ángeles Martínez, Rut Tenorio, Sole Romero, Elena Fernández, Rocío Diaz, María Luisa Ulgar, Lola Peláez y Rosa Lozano.
Según este Observatorio si atendemos a la definición de Metaverso “El término metaverso está formado por el prefijo de origen griego 'meta' que significa más allá y la raíz 'verso', derivada del término universo. Hace referencia a una realidad inmersiva a la que los usuarios acuden, a través de sus avatares, con dispositivos de realidad virtual y aumentada, y donde interactúan como si se tratara del mundo físico. La gran diferencia con lo que conocemos hasta ahora es la inmersión en este mundo virtual en el que los usuarios van a socializar, trabajar y vivir” nos enfrentamos a un gran reto social y económico para el que usuarios, empresas y administraciones públicas deben prepararse para poder interactuar en él. En este reto jugará un importante papel la visión y experiencia de las mujeres con objeto de que en el desarrollo e implementación del mismo no se produzcan sesgos que originen brechas de género que impidan la incorporación de la mujer en todos los ámbitos en los que se prevé que este nuevo ecosistemas tenga impacto (laboral, educación, económico, social ocio...).