Entre aplausos miles de personas han despedido al escritor Antonio Gala.
Admiradores, familiares y amigos han acudido al salón de actos de la Fundación Antonio Gala, en Córdoba, para mostrar sus respetos por última vez al dramaturgo, novelista, poeta y ensayista que fallecía este veintiocho de mayo a los noventa y dos años de la verdad.
Su obra, que es inmensa la obra de una vida entera viviendo desde desde casi niño y queda gran parte de su alma ex-ante ni es tan importante, es tan grande que su obra queda, perdura y crecerá.
Y la Fundación sigue, perdura y [crecer] [a] una figura clave de la literatura española que hoy más que nunca ha recibido un reconocimiento público a una persona polifacética, un poli [matador], nacimiento [casino] Antonio era una persona especial porque eligió esta ciudad de Córdoba para cogerse su lugar.
Su tierra El féretro con sus restos mortales que ha sido sacado a hombros, entre otros, por el rector de la Universidad de Córdoba, Manuel Torralbo.
El escritor, músico, jurista Antonio Manuel Rodríguez, diputado nacional del PSOE por Córdoba Antonio Hurtado, [además] de por miembros de la Fundación y familiares de Antonio Gala Su dirigió finalmente [hace] [a] un tanatorio de la ciudad para su incineración.
Esta forma, las cenizas del hijo adoptivo de la ciudad de Córdoba, tal y como él pidió, descansarán en su amada [fundación].