Opinión

Manuel Bohórquez

Caminos del despropósito jondo

TVE / Manuel Bohórquez

Radio Televisión Española prepara un nuevo programa de flamenco que tendrá como presentadores a Miguel Poveda y Soleá Morente. Esto no es lo grave, sino que encima la tele pública diga que la hija de Morente “es uno de los rostros imprescindibles del flamenco actual”. Imprescindible quiere decir que no se puede prescindir de ella, ¿no? No se puede cantar ya peor que Soleá Morente, lo que es el flamenco, sencillamente porque no es un ser dotado para cantar lo jondo. Que puede resultar bien como presentadora de un programa de flamenco porque se apellida Morente, puede que sí, aunque lo dudo. En cuanto a Miguel Poveda, la gran figura del cante comercial, de espectáculo, es el cantaor menos estudioso que he conocido y la figura que menos ha aportado al cante flamenco en las últimas décadas. Que puede ser un buen presentador para el nuevo engendro flamenco de RTVE, quizá. En esa casa se han hecho programas y series interesantes sobre nuestro arte, como Rito y geografía del cante, Rito y geografía del baile, y La buena música de los flamencos. ¿Desde cuándo no tienen un buen programa dedicado a este arte tan maltratado por los distintos gobiernos de la democracia? Pues ahora se van a dejar caer con un espacio que presentarán los dos artistas citados. Dicen en la promoción que Soleá Morente “no se declara cantaora, sino flamenca y rockera”. Muy emotivo. El programa, que empezará a rodarse en Sevilla, recorrerá la geografía flamenca para dar a conocer a los artistas actuales y no estará enfocado solo a los aficionados, sino también a los no iniciados. Para estos, nada mejor que Poveda y Soleá Morente, que están muy puestos en lo de dar cursos y conferencias por el mundo entero. Quién no tiene en su casa un libro de flamenco de estos dos catedráticos del arte de Silverio y la Parrala de Moguer. Poveda se define como “flamenco, coplero y amante de la música latina”, que ya es una buena carta de presentación. Manda narices. En fin, como el movimiento se demuestra andando, será cuestión de esperar a ver cuánto chanelan de flamenco estos dos artistas modernos. Mientras, esos jóvenes periodistas metidos a críticos o esos flamencólogos de acreditada valía estarán preguntando ya dónde se puede ir a coger algodón o a abrir calicatas, para llenar la nevera.