Opinión

María Graciani

¡A lo Baloo!

¡A lo Baloo!

¡A lo Baloo! / María Graciani

Disney sigue siendo una divertida fuente de inspiración para mí, ¿recuerdas cuando Baloo le cantaba a Mowgli la canción de «Lo más vital»? En mi mente veo al simpático oso bailando mientras le tarareaba al niño:

«Busca lo más vital, no más

lo que es necesidad, no más

y olvídate de la preocupación.

Tan solo lo muy esencial

para vivir sin batallar

y la naturaleza te lo da...

Doquiera que vaya

doquiera que estoy,

soy oso dichoso.»

Ayer por la tarde tuve un momento a «lo Baloo», cuando salí a mi jardín y cogí una hoja de aloe vera: la lavé, la preparé y me la puse por la cara, ¡qué sensación más refrescante! Guardé el resto y pensé: «¡cuánta razón tenía Baloo! Tantos anuncios de `cremas milagrosas´ y... ¡Tengo una auténtica maravilla en mi jardín!«.

La gran verdad que se escondía en la canción de «El libro de la selva» es que «hay que buscar lo esencial», porque en la esencia y en la sencillez de las cosas es donde residen las almas dichosas... Llegué a esta conclusión mientras preparaba el aloe porque, para poder beneficiarnos de todas sus propiedades hay que lavarlo, quitarle las espinas laterales así como la piel para llegar a su maravilloso gel, ¿no te parece que las personas nos parecemos bastante al aloe? Porque para llegar a disfrutar de nuestra esencia, para lograr conocernos de verdad necesitamos liberarnos de nuestras espinas, desnudarnos mental y emocionalmente y... Voilà! Exactamente ahí es el lugar donde reside nuestra magia...

Esa «magia» se llama encanto humano, y, al igual que la sábila (nombre por el que también se conoce al aloe), si lo aplicas a diario, rejuvenece las relaciones, te ilumina el día, ¡y hasta las habitaciones!, te llena de energía y te transforma en imán de la alegría...

¿Fuente de la eterna juventud? No lo dudes... ¡A lo Baloo! Eres : Talento Único (Y ahora... ¡A bailar!).