Carta abierta a Juanma Moreno

Querido Juanma:

Permíteme unas líneas desde la más absoluta cercanía, tal como a ti, aparentemente, te gusta ser con el pueblo, del que me considero parte. Antes de nada, felicitarte por tu victoria amarga. Quizás no ha sido el mejor de los escenarios posibles. En esto tenemos que darle la razón al PSOE: ha sido un pacto de perdedores. ¿O no? ¿Acaso un segundo lugar es un fracaso para el que corre una maratón de 42 kilómetros? Sea como fuere, mis felicitaciones. El cambio era necesario. Por higiene democrática.

Pero no quiero ser adulador en mi misiva, porque quiero hablarte de muchas cosas y el tiempo y el espacio es limitado. Ha pasado ya un trimestre desde aquella victoria y, qué quieres que te diga, el cambio, para el que se levanta día a día a las 6:30 de la mañana, es prácticamente imperceptible. Si quieres me paro a darte ejemplos.

Aún tenemos que seguir esperando meses y meses, algunos hasta años, a que nos envíen una cita médica para exámenes de los denominados de última generación o una simple intervención. Tengo un familiar que lleva nueve años esperando un análisis genético, para saber si los que somos sangre de su sangre podemos desarrollar tal o cual dolencia. Aquí seguimos, a la espera de ese sobre. Y no tenemos ni una pega de los profesionales médicos, que se parten la cara día a día. Pero nueve años es una eternidad. Y no es grave, pero imagínese el que tenga que operarse de un brazo o una pierna, todo lo que sufre día a día, ya que, al contrario de lo que os ocurre a los políticos, su día a día no va con alfombra roja.

En los colegios e institutos la cosa sigue más o menos igual. Clases masificadas, burocracia y papeleo excesivo y desprotección total del docente ¿Sabes por qué? Pues porque aún tenemos que soportar los docentes clases más propias de los 80 que del siglo XXI. Olvídate de equipararnos a Finlandia. Primero, porque no tenemos calefacción en las aulas. Segundo, porque somos un país latino, mediterráneo. Con que bajemos del vagón de cola en abandono escolar y del informe PISA... Solo te pido un favor: escúchanos a toda la comunidad educativa. Y no sólo a los compañeros de la pública: también a los de la concertada, pues somos la quinta parte de Andalucía y no hacemos ningún mal, tal como se sigue instilando en algunos sectores que quieren demonizarnos. Explícales que, al igual que se externalizan muchos servicios desde que Andalucía es Andalucía, nosotros hacemos lo mismo.

En el tema de los servicios sociales, ni qué decir tiene que el caos se ha apoderado de Andalucía desde hace casi una década. ¿Los profesionales? Unos cracks. Pero no es de recibo que en el asunto de la dependencia hayan llegado cartas a familiares para cierta ayuda cuando esa persona que era dependiente ya ha fallecido. La saturación es evidente.

De empleo, ¿qué decirte? Pues que seguimos apostando por un modelo en el que la temporalidad lo marca todo. Es increíble que la percepción que tiene la juventud siga siendo que, a pesar de sus estudios, acabarán de camareros en algún chiringuito de playa. ¿Vais a apostar por una FP Dual de verdad? Me refiero, haciéndole ver a los empresarios que no es ningún marrón, sino una oportunidad de desarrollo en la empresa. Los educadores ya se ocuparán de enviar a buenos aprendices. Y por cierto, no te olvides del sector agrícola, tan necesario para seguir creciendo. Y de una industrialización adaptada al mundo que viene, no al estilo de Henry Ford. Si no queremos sufrir la crisis en ciernes, ve arengando a los tuyos a que trabajen en anticiparse.

Por último, no me quisiera extender mucho más ni robarte más tiempo, pero tengo que contarte que envidio cómo regiones que un día fueron pobres han avanzado a pasos agigantados por apostar por el talento, la llegada de empresas y el desarrollo sostenible. Tenemos nuestros parques científicos y tecnológicos a medio gas, con la de creatividad que hay en nuestras cabezas locas... Cree usted un fuero para los autónomos, pobres míos atosigados a impuestos. Haga algo para que el que no tenga trabajo, se ilusione con posibilidad de volver a currar porque las empresas, más allá de lo público, vuelven; el que tenga trabajo pueda llegar a fin de mes sin problemas y para que Andalucía recupere la sonrisa que sólo saca en ferias y carnavales.

Sin más, espero lea la carta, no la guarde en un cajón y, si quiere, me responda abiertamente o en el buzón de mi santa casa o de mi email, autovía de la comunicación en una sociedad global a la que, como ocurre con las de alquitrán, muchos pueblos y ciudades de nuestra tierra siguen aún sin poder disfrutar.

Atentamente,

Ezequiel García.