Desvariando

Con Pedro Sánchez en First Date

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Manuel Bohórquez @BohorquezCas
26 mar 2022 / 09:59 h - Actualizado: 26 mar 2022 / 10:01 h.
"Desvariando"
  • E. Parra./ E.P
    E. Parra./ E.P

Si un día fuera al popular programa de Carlos Sobera a buscar pareja y me tocara Pedro Sánchez, que nunca se sabe, le diría, seguramente, al final: “Mira, eres un chico muy guapo, me has caído bien, pero no hay química y no quiero una segunda cita contigo” Esta es la parte más graciosa del programa: cuando tienen que decidir si quieren o no una segunda cita con la persona que le han buscado como posible pareja. Un caso, literalmente: “Eres un sol, guapo, cariñoso, con dinero y dócil, pero no eres mi tipo”. Él era, en efecto, un pincel, para adoptarlo, y ella un loro de aquellos sin apenas plumas que vendían en el extinto mercadillo de la Alfalfa. Mi problema con Sánchez es la falta de química. De verdad que estos días he sentido penilla de él, con el país tan revuelto, quizá como nunca en la democracia. Pero cuando más pena me dio fue ayer, en Bruselas, en el Consejo Europeo, viéndolo apartado del grupo de presidentes europeos y el de Estados Unidos. Daban ganas de achucharlo. Toda la vida intentando descubrir qué es la soledad y la vi ayer. Me impactó ver la mirada del presidente, que delataba un estado de ánimo como de bochorno. No era para menos. Intenta ser un líder internacional potente, como Dragui, pero no puede ser. La cara que se le quedó también ayer cuando el primer ministro italiano le llamó Antonio Sánchez. Imaginen que le hubiese llamado Enrique Pantoja a Joe Biden. A veces, el presidente parece un perrillo abandonado arrimándose a los transeúntes para que alguno se lo lleve a casa. No es que España no sea un país importante y querido en todo el mundo. Es que Pedro Sánchez es lo mínimo que se despacha en líder europeo. En plena crisis del transporte, se fue de gira buscando el apoyo de sus homólogos para solucionar en parte los altos precios de la energía. Pensó, que si se iba a Europa y era capaz de encontrar esos apoyos, y aquí, en España, la ministra que llamó fachas a los autónomos del transporte era capaz de que se desconvocara la huelga o el paro del sector, podría regresar siendo aclamado hasta por la oposición, que es lo que más le gusta. El sagaz Pedro Otamendi recordaba anoche el tuit publicado por la Unión Europea el pasado 8 de este mismo mes: ”Los países de la UE podrán regular los precios y redistribuir los ingresos procedentes del sector energético y del comercio del derecho de emisión a los consumidores”. Entonces, ¿cuál ha sido el éxito de Sánchez? Que él lo necesitara como el campo la lluvia, vale. Para colmo, los convocantes del paro del transporte no se han creído a la ministra y seguirán en la lucha no se sabe hasta cuándo, así que se le ha aguado un poco la fiesta al presidente. No obstante, el hombre se ha esforzado y se ha traído algo. Menos da una piedra. Al final acabaré cogiéndole cariño.