El cohete español perdido era 75 por ciento cañí

Image
17 nov 2020 / 13:06 h - Actualizado: 17 nov 2020 / 13:15 h.
"Tecnología","Opinión","Ciencia"
  • El satélite Ingenio se pierde tras fallar el cohete Vega. / EP
    El satélite Ingenio se pierde tras fallar el cohete Vega. / EP

Pues nada. El cohete Vega, ocho minutos después de ser lanzado, ha tomado la dirección equivocada y se ha llevado consigo un satélite con el 75 por ciento de sus componentes de fabricación y diseño cañí. El satélite se llamaba SeoSat-Ingenio y estaba previsto que se colocase en órbita heliosíncrona a 670 kilómetros de altura. Pero no, ocho minutos después, los 200 millones de euros que ha costado el artefacto se han perdido para siempre.

Es una pena porque nuestro ministro astronauta había presentado un informe en el Consejo de Ministros para detallar todo eso que podría hacer el satélite Ingenio (desde detectar incendios o construcciones ilegales a gestionar recursos naturales midiendo, por ejemplo, el agua acumulada en los embalses). Y ahora va a tener que llamar a Sánchez para explicar cómo es esto posible y para comunicarle que necesita otros 200 milloncillos de nada. Se la va a ganar.

¿Qué tiene la ciencia y la tecnología española para que tengamos tan mala suerte? Si no se invierte, el problema es muy fácil de detectar: no hay recursos económicos y no se puede hacer nada de nada. Pero esta vez se ha invertido y resulta que los italianos envían un cohete al espacio que se estropea a los ocho minutos.

Tal vez esto sea algo parecido a lo que sucedía con la selección nacional de fútbol; no había forma de pasar de cuartos de final en los grandes torneos hasta que se ganó un campeonato europeo y, más tarde, el mundial. En el fútbol alguien se volvió chalado y comenzó a traer a los mejores del mundo. Así todos aprendieron de ellos y los niveles de calidad se dispararon. Por eso se ganaron cosas. En el ámbito científico, en lugar de traer a los mejores para que enseñen a los más nuevos, se van nuestros talentos; en lugar de potenciar los proyectos lo que hacen los Gobiernos es tener en cuenta el muy corto plazo para repetir victoria electoral. Y así nos va.

Seguramente, el satélite era una maravillosa porque nuestros científicos son extraordinarios. Pero ya no lo sabremos. Y lo peor es que los proyectos son tan poquitos que perdiendo esta oportunidad no podemos esperar un éxito en una ocasión cercana. No hay grandes cosas a la vista. Siempre suena la misma canción.