Fernando Simón me recuerda a un humorista que trabajaba en La Trocha, el desaparecido tablao de Sevilla. No era tan guapo, pero no sé por qué me acuerdo de él cada vez que veo a este señor en la tele. Lo último que le he oído decir es, con el sector turístico hundido, que nos beneficia el hecho de que no vengan los ingleses a veranear a nuestro país, por nuestra seguridad. Este señor es un irresponsable y el Gobierno, entero, también por meter tanto miedo con los rebrotes, las mascarillas sí o sí, el cambio constante de criterio, otra vez, como en el inicio de la pandemia, etc. «Ahora estamos más preparados», dicen, pero como ciudadano estoy lo que se dice acojonado y no solo porque el dichoso virus me pueda llevar al camposanto, que no sería lo más malo, sino porque me pueda arruinar definitivamente si nos volvieran a encerrar, que vamos camino de ello.
Mientras, Pedro Sánchez sacando pecho en Telecinco con Pedro Piqueras en Babia: «Los 140.000 millones del acuerdo europeo representan, para que se hagan una idea, en torno al 60% del PIB de 2019». ¿Quién le ha habrá pasado las cuentas, Tezanos, que lo engorda todo? A Piqueras se las cuelan a veces por entre las cachas. No representa ni el 14 % del PIB del pasado año. Pero da igual, el presidente sigue en su burbuja de guapo feliz celebrando su pelotazo europeo, y Fernando Simón hundiendo aún más al turismo, que nos llevará definitivamente a la quiebra económica y social. Menos mal que Sánchez e Iglesias le van a hacer caso a Íñigo Errejón, un hombre de experiencia de gobierno, y van a llevar a cabo la reindustrialización de España en seis meses, luego no vamos a tener que depender del turismo para sobrevivir. Hay que levantar el ánimo porque ya somos una potencia mundial del paro, el país con más desempleo de Europa, y aún no ha llegado el otoño.
Los economistas más solventes hablan ya de «desastre económico» y de «empobrecimiento del país», cuando hay otros países, como Portugal, que saldrán mejor que nosotros. Ojalá no haya un efecto imitación del veto inglés, porque podemos tener una Navidad muy dura. La ministra Maroto trabaja de manera acelerada en convencer al Gobierno del Reino Unido de la creación de unos corredores con Baleares y Canarias, al menos, pero la cosa no pinta bien. Si quieren ver corredores, asómense a las ventanas porque aquí hay ya quienes corren que se las pelan para no ver al Gran Simón en la tele haciendo de las suyas. Este señor es un chollo, pero para otros países.