En Estados Unidos la política es una tramoya de equilibristas, al abrigo de una cámara de fondo.
En 1969, mientras el mundo miraba asombrado el aterrizaje del Apolo 11 en la Luna, hay quien sostiene que las imágenes fueron grabadas por Stanley Kubrick, no en vano la bandera ondea cual desierto, con la diferencia de que en la atmosfera de ese planeta nunca sopla el viento.
Otros sostienen que ningún avión se estrelló en el Pentágono o que las propias imágenes de la ejecución de Bin Laden que se describen en la película “La noche más oscura”, no son más que las escenas grabadas en una base americana en Pakistan, donde aquel llevaba varios años recluido y moribundo. Y es que hasta la muerte es un espectáculo majestuoso que retribuye votos en una elección. (Obama dixit).
La realidad no es más que una ficción contada y ya hasta una crema sustraída convulsiona la Presidencia de una Comunidad Autónoma.
Hay quienes multiplican las banderas en los telones de las ruedas de prensa conjuntas, como Ayuso con Pedro Sánchez; y a veces Rafa Nadal parece hasta llorar, mientras se iza la bandera de España convenientemente sobreimpresionada.
En breve, tendremos robots sexuales y úteros externos. Un alivio para los contumaces de la soledad, si no fuera porque incorporarán micrófonos que conformarán y definirán los futuros productos más vendidos para la líbido.
Y es que ya hasta el VAR es menos fiable que Undiano Mallenco.
En fin, todo depende del ángulo, como el derecho o el revés del Cambalache de Gardel.
Trump insiste en que las elecciones americanas han sido un fraude; en España, no hace mucho Vox y el Juez Serrano insistieron en que los recuentos no se hacían sobre papeletas físicas, sino sobre atribuciones virtuales e incluso alguna vez escuché declarar vencedor de las Elecciones Andaluzas a Javier Arenas, con mayoría absoluta sobre Griñan.
Rudolf Giulani, fue Alcalde de Nueva York. Su reacción ante el 11-S en que se desintegraron las Torres Gemelas, le convirtió en un héroe y la propia Oprah Winfrey lo calificó “el Alcalde de los Estados Unidos”
Ahora es el Abogado personal de Trump.
Seguro que les sorprendió su pañuelo blanco sofocando el sudor y el hilo negruzco a la deriva como el del Prestige.
Clint Eastwood dijo que el mundo se divide en dos categorías, los que usan revolver y los que cavan.
Si siguen pensando que lo que vieron es real, ignoran que Giulani cobra veinte mil dólares al día, así que sigan cavando...
Y ahora, Alexa, díme: “¿cúales son las noticias del día?