Desvariando

Gente de bien y la buena gente

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Manuel Bohórquez @BohorquezCas
25 feb 2023 / 09:54 h - Actualizado: 25 feb 2023 / 09:54 h.
"Desvariando"
  • El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante la sesión de control que celebra el pleno del Senado este martes. EFE/ Mariscal
    El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante la sesión de control que celebra el pleno del Senado este martes. EFE/ Mariscal

Siempre me gustó, desde niño, la expresión gente de bien, esa frase que tanto se ha manipulado estos días tras decirla el señor Feijóo en el Senado. Paxi López dijo a continuación que gobernaban “para la buena gente”, y no ha pasado nada. ¿Solo para la buena gente? Se supone que el Gobierno no debe hacer distinción entre ciudadanos buenos o malos, honrados o mangantes. Hasta un condenado por violación tiene sus derechos y el político vasco debería saberlo bien porque muchos delincuentes sexuales se están beneficiando de una ley fallida del Gobierno, porque no han perdido sus derechos como ciudadanos. Por tanto, un gobierno no gobierna solo para ciudadanos modélicos, de esos que lo entregan todo en casa. En Palomares, la gente de bien eran personas honradas y de buenas intenciones. Escuché al líder de la oposición decir eso y no le di ninguna importancia. Pero claro, como todo indica que será antes de Navidad el nuevo inquilino o de la Moncloa, hay que tumbarlo. Incluso los voceros y pelotas de Sánchez han llegado a decir que el gallego puede perder las elecciones por utilizar esa expresión, que es ya el acabose. Andan desesperados. Al partido Socialista le está saliendo bien la campaña “Somos el Gobierno de la gente”, aunque no puede ser más tonta, pues ahora están legislando, y con bastante ruido, en favor de los animales. Mis gatos adoran ya a Ione Belarra y han asegurado que si se cuela un ratón en la casa lo invitarán a té con pastas. España es un país de gente de bien, de trabajadores honrados y entregados a las causas más nobles. Los que no son gente de bien son quienes le roban al pueblo o se gastan el dinero público en prostitutas y cocaína. El de los parados, por ejemplo, como pasó en Andalucía. No pasa nada porque un líder político destaque a la gente de bien, digamos que como premio. Distinto hubiera sido si llega a decir “gente bien”, que tiene otro significado. Pablo Iglesias es “gente bien”, porque a pesar de que ya no es vicepresidente del Gobierno, sigue teniendo coche oficial y guardaespaldas con cargo al Estado que odia. Un hombre de bien es un buen hombre y el podemita está lejos de esa etiqueta. Feijóo, no tanto. Pertenece a la gente de bien y parece un buen hombre. No enreden.