Durante estos días Sevilla ofrece a Andalucía y a España la oportunidad de ver tenis de altísima calidad, y lo hace a través del Real Club de Tenis Betis, entidad la cual organiza la 56 Edición de la Copa Sevilla, con categoría de Challenguer desde 1991, y considerada por todo el mundo del tenis como la competición tenística por antonomasia de Andalucía y la cuarta mejor de España. Bastó un momento para constatarlo en su presentación y ver como desde el punto de vista deportivo, institucional y político el evento que se estaba desarrollando nadie se lo quería perder.
El gran culpable de que todos –anualmente– nos demos cita allí es el Real Club de Tenis Betis, más concretamente sus responsables. Porque es entrar en el Club y encontrar desparramadas corrección y empatía por todos ellos. Desde Almudena Díaz o Jose María León –director del Torneo– volcado en no perder detalle en lo deportivo, a Álvaro Troncoso –gerente del club– pendiente de encontrar cualquier destello que hiciese que el club brillase con luz propia en lo social. Porque para lo institucional ya estaban –¡y de qué manera!– su actual presidente, José María Fernández de Loaysa, otro que lo fue, Javier Aguirre, y el resto de la junta directiva.
Los clubes sevillanos en general prestan una labor a la ciudad verdaderamente admirable, y el Tenis Betis en particular uno de los servicios impagables que presta a Sevilla es el tenis con mayúsculas, es la Copa Sevilla y los valores que ella representa.
Me tomo la libertad de poner en mi boca lo ya dicho por el club, e invitar a todos los amantes del deporte hasta el próximo sábado incluido –día en que se disputará la final– a gozar de un inmejorable torneo de tenis.
Mientras tanto, ¡sé feliz!
Durante estos días Sevilla ofrece a Andalucía y a España la oportunidad de ver tenis de altísima calidad, y lo hace a través del Real Club de Tenis Betis, entidad la cual organiza la 56 Edición de la Copa Sevilla, con categoría de Challenguer desde 1991, y considerada por todo el mundo del tenis como la competición tenística por antonomasia de Andalucía y la cuarta mejor de España. Bastó un momento para constatarlo en su presentación y ver como desde el punto de vista deportivo, institucional y político el evento que se estaba desarrollando nadie se lo quería perder.
El gran culpable de que todos –anualmente– nos demos cita allí es el Real Club de Tenis Betis, más concretamente sus responsables. Porque es entrar en el Club y encontrar desparramadas corrección y empatía por todos ellos. Desde Almudena Díaz o Jose María León –director del Torneo– volcado en no perder detalle en lo deportivo, a Álvaro Troncoso –gerente del club– pendiente de encontrar cualquier destello que hiciese que el club brillase con luz propia en lo social. Porque para lo institucional ya estaban –¡y de qué manera!– su actual presidente, José María Fernández de Loaysa, otro que lo fue, Javier Aguirre, y el resto de la junta directiva.
Los clubes sevillanos en general prestan una labor a la ciudad verdaderamente admirable, y el Tenis Betis en particular uno de los servicios impagables que presta a Sevilla es el tenis con mayúsculas, es la Copa Sevilla y los valores que ella representa.
Me tomo la libertad de poner en mi boca lo ya dicho por el club, e invitar a todos los amantes del deporte hasta el próximo sábado incluido –día en que se disputará la final– a gozar de un inmejorable torneo de tenis.
Mientras tanto, ¡sé feliz! ~