El porqué nos cuesta tanto llevar el pensamiento a otros lugares es un misterio. Hay gente entrenada físicamente que consigue que sus músculos les obedezcan, de manera que seguramente deberemos de entrenar nuestro cerebro y así llevaremos los pensamientos a un lugar que nos relaje y tranquilice. En esta tarea no nos puede ayudar nadie, sólo nosotros con nosotros mismos tenemos que conseguir que se imponga lo que nos haga sentir bien.
Entrenar a diario, hasta que se logra lo deseado, es pesado, pero si pensamos en lo que nos hará felices necesitaremos menos esfuerzo. Cuando tenemos tareas duras y dolorosas y pensamos en las recompensas que nos puede aportar, la energía hacia esa meta surge sola. Muchos libros de autoayuda que escriben americanos que hacen realidad sus sueños de riqueza y reconocimiento social repiten que se llevaron muchas decepciones antes de lograr su objetivo, y de una u otra forma nos llaman la atención para lograr lo que nos propongamos. Yo soy del sur de España y ese modelo no me motiva, porque sólo busca reconocimiento social y económico, sólo ve grandeza en crear un personaje socialmente aceptado y con una cuenta corriente con muchos ceros.
Me motivan más y me hacen reflexionar más las personas que se superan para conseguir vivir en paz con ellos mismos y sacar así partido a todo lo bueno que su vida les tenga reservado. Esta superación con uno mismo me la enseña por ejemplo Rafa Nadal, o cualquier españolito de a pie que consigue vencer su lucha interna y hace de sus pensamientos bálsamos que le dan felicidad.
Esta filosofía profunda la posee mucha gente sencilla de los pueblos de Andalucía, e imagino que del resto de España. Estos verdaderos triunfadores han conseguido instalar en sus cabezas lugares que les producen paz y pensamientos sanos. En general se dice que la gente del campo es sana, pero también la hay gente en las ciudades, y todos coinciden en que han practicado la gimnasia en sus cerebros que les conduce a tener músculos grandes que les defienden de tristezas e intranquilidades. ~