La vida del revés

La televisión de la vergüenza

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16 dic 2021 / 07:14 h - Actualizado: 16 dic 2021 / 07:20 h.
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  • La televisión de la vergüenza

El panorama televisivo es desolador. Algunas cadenas han convertido las pantallas de los televisores es verdaderos estercoleros y se afanan por llenarlos de casquería emocional, basura en forma de reality o contenidos nefastos, soeces y vergonzantes.

Los hay que no pierden oportunidad para rentabilizar la muerte de una famosa o de la hija de un famoso o de cualquiera que se pueda convertir en la carroña que alimenta mentes perversas y retorcidas a más no poder. Otros muestran las miserias de las personas para subastar su dignidad en la propia pantalla y en las redes sociales. Y esos mismos han decidido reunir a un grupo de jóvenes para saber hasta dónde estarían dispuestos a llevar su fidelidad o, por el contrario, tirar por la borda sus relaciones. Y, para cerrar el círculo, cualquier asunto serio y delicado queda en manos de un grupo de tuercebotas que destacan en el insulto, en la superficialidad, en la ramplonería y en ensalzamiento de lo paleto. Da lo mismo si el tema a tratar es la pandemia o una erupción volcánica porque la audiencia es la audiencia.

Todos en televisión basura hacen caja. Los huérfanos, las viudas, los amigos de los amigos de los novios de las esposas abandonadas por un impresentable. La cadena de favores es inmensa. Y es que este tipo de cosas se retroalimenta sin remedio de las mismas desgracias.

Los amores se tachan de montajes y casi siempre lo son; las muertes se mercantilizan aunque se intenta disfrazar el bochorno de homenaje y de mimos y de feminismo y de libertad de expresión (es un bochorno y punto); las relaciones entre hombres y mujeres quedan convertidas en una especie de subasta en la que gana el que más infiel es. La televisión basura está llegando a niveles desconocidos. Pasarán los años y nos tendremos que preguntar cómo fuimos capaces de alimentar tanta mugre y tanta desfachatez.

Y, mientras, la dignidad humana pisoteada tarde tras tarde y noche tras noche.