Los medios y los días

No sin la mascarilla

Image
23 jun 2021 / 12:07 h - Actualizado: 24 jun 2021 / 04:00 h.
"Los medios y los días"
  • Foto: EFE
    Foto: EFE

Pues a mí me parece muy arriesgado lo de quitarse ya la mascarilla. El consejo de ministros de mañana viernes lo va a aprobar pero eso es una decisión política, no terapéutica, ya no podemos creernos que Sánchez nos hable de expertos porque no había expertos cuando nos aseguraba que consultaba con un comité de expertos. Hay una incidencia alta aún del virus, sobre todo en Andalucía, tenemos ya casi encima al Sars Cov2 Modalidad Delta, no se ha llegado a ese 70 por ciento de vacunados del que nos hablaron hace meses, la gente empieza a arremolinarse cada vez más en este tiempo y los que más se arrejuntan son los treintañeros y millennnials que están sin vacunar. El virus va a ir ahora a por los cuerpos más jóvenes todavía, llegan las noches de playa, la costa del Guadalquivir, los eventos veraniegos de todo tipo. Claro que son estos motivos que a mí me hacen recelar los mismos que a los políticos los impulsan a autorizar las mascarillas en espacios externos.

Si algo nos ha enseñado el Covid con claridad es que los seres humanos no somos iguales desde el punto de vista de los deberes. En derechos somos iguales porque lo aseguran los papeles que son muy sufridos pero tampoco, hay personas que no merecen algunos derechos porque no cumplen algunos deberes, como eso no se puede medir porque quienes estemos libres de pecados tiremos la primera piedra, se suele aplicar sanción cuando se agarra infraganti a alguien de fiestorra pasándose al virus por el forro de sus caprichos.

Aquí el que más y el que menos se cree el cuerpo impenetrable o, sin pretenderlo, involuntariamente, a causa del ritmo frenético de la vida y de los compromisos ineludibles, de pronto te ves metido en situaciones que llegan a preocuparte seriamente en el momento o ya después cuando uno reflexiona y se da cuenta de lo que ha hecho. Bueno, pues todo eso ahora se va a llevar a cabo sin mascarilla, la misma medida que supongo que tenía pensada Sánchez para estas fechas en las que preveía tener vacunada a un 70 por ciento del personal la va a tomar sea como sea. Este hombre es inquietante, cuanto menos, sigo queriendo comprobar in situ si este falsificador de tesis doctorales –que lo hace y no le pasa nada- es capaz de hacer todo el asunto de los indultos y ahora la “operación mascarillas fuera” para ganar elecciones, para su propio beneficio. Estará bien que si persigue eso lo vea toda España ya sin duda alguna.

Por lo pronto, se apunta esos dos “éxitos” –indultos y mascarillas- más el acuerdo sobre las pensiones. De aquí a dos años aproximadamente que quedan para los próximos comicios se apuntará más y si lo hace bien desde el punto de vista del marketing político, como tiene mucho más tirón que Casado, se llevará de nuevo el gato al agua. La apuesta de Sánchez es muy fuerte, lo de las mascarillas me parece puro populismo pero lo de las negociaciones con los independentistas catalanes es necesario, no puedo asegurar que lo haga sólo por mantenerse en el poder como aseguran personas probablemente más preparadas que yo, pero de lo que sí estoy seguro es de que esa mesa es necesaria no ahora solamente sino que ya lo era en tiempos de Zapatero y de Rajoy. La verdad es que el miedo a la libertad de la derecha española no parece terminar nunca, da la impresión de que sin el palo y tente tieso y sin un caudillo no sabe hacer nada que mire al futuro. Unos se pasan, como Sánchez con las mascarillas, y otros no llegan, como el dúo PP-Vox.