Ojana in Excelsis

Parque de atracciones Sevilla S.L

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Juanmi Vega @Juanmivegar
15 oct 2022 / 09:00 h - Actualizado: 15 oct 2022 / 09:00 h.
"Ojana in Excelsis"
  • Parque de atracciones Sevilla S.L

Nuestra ciudad se está convirtiendo en todo un parque temático para extranjeros. La que fuera puerto y puerta de Indias abraza a los de fuera como el oro que entraba por el Guadalquivir.

Cada vez es más complicado vivir en nuestra ciudad. Nos hemos enorgullecido siempre de la calidad de vida que nos da esta urbe, pero lleva años desapareciendo por las garras de los que quieren más por menos. Mejor vender una cerveza a tres euros que tres a uno con veinte cada una.

Esa calidad de vida desaparece. Ya no tenemos un lugar dónde ir. Antes, cuando eran altas horas de la noche, sabías que en El Rinconcillo había un soldado de pavía y una tortilla francesa, poco hecha, esperándote. Ahora, los que esperan son los guiris para vivir una especie de simulación de lo que es ser sevillano.

Muchos dicen, yo me incluía hasta hace poco, que esto es inevitable, que en las ciudades como Venecia, Roma, Nueva York o Paris ocurre lo mismo. Mi pregunta es, si lo sabemos, ¿por qué no lo evitamos? Porque no interesa y muchos lo defienden.

El pasado lunes, me encontré la calle Castellar cortada al tráfico y a los peatones por un rodaje. Serían las 13 horas. Los pocos negocios que allí hay, perdieron ese día. Lo comenté por Twitter y me lo compararon a la Semana Santa o a la Feria.

La encrucijada en la que se encuentran nuestros gobernantes es importante. Dejar que el turismo invada por completo Sevilla o pasar hambre porque un nuevo modelo productivo no se consigue en 4 años, que es la altura de miras que tienen los que mandan.

No hay mes que no reciba la convocatoria de la inauguración de un hotel en el Centro. Cada vez más camas para los de fuera y los de aquí tenemos que irnos a las afueras.

Sevilla es lo que es no por la Giralda, la Torre del Oro, la Plaza de España, las Setas ni la Catedral. No. Sevilla es Sevilla por los sevillanos y sin éstos, la ciudad será una especie de parque Disney al que no le hace falta que venga el ratón Micky, que aquí nos sobran con los que campan por los contenedores y arriates de nuestra ciudad.