Los medios y los días

¿Por qué incendiaron la catedral de Nantes?

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28 jul 2020 / 04:00 h - Actualizado: 28 jul 2020 / 04:00 h.
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  • Incendio en la catedral de San Pedro y San Pablo de Nantes. / EFE
    Incendio en la catedral de San Pedro y San Pablo de Nantes. / EFE

La incendiaron. Algunos lo han tenido claro siempre: le metieron fuego queriendo y fueron los enemigos de la cristiandad que es como decir los enemigos de mi cultura que es tanto lo cristiano como el Renacimiento, Barroco, materialismo, el imperialismo del siglo XIX, etc. Asumo lo blanco, lo negro y lo gris porque es mi vida y no me arrepiento de ella, al revés, asumo sus vilezas y sus grandezas y aprendo de ellas porque eso es la Historia y mi historia.

La primera noticia me llegó desde la cadena de TV Euronews que lo publicó en su web el sábado 26/7/2020: “Un hombre de 39 años de origen ruandés, voluntario de la diócesis y refugiado en Francia, ha admitido ser el responsable del incendio. El abogado Quentin Chabert ha asegurado al periódico local Presse-Océan que su cliente está "consumido por el remordimiento" y ha admitido estar "liberado" después de asumir el incidente. Tras el incendio fue detenido y liberado al día siguiente sin cargos. Este mismo sábado, de madrugada, las autoridades le han vuelto a poner bajo custodia policial. El sospechoso era el encargado de cerrar la catedral la noche anterior al incendio, según confirmó el padre Hubert Champenois, rector de la catedral de Nantes. En declaraciones a AFP, el rector aseguró que conocía al voluntario "desde hace cuatro o cinco años y que "confiaba en él como en todo el personal", añadió.

De manera que la policía cuando lo detuvo detectó contradicciones y vacilaciones pero lo dejó en libertad y además sin cargos. Y ahora el abogado ha debido decirle mira mozo declárate culpable y será mejor para ti. Y las autoridades eclesiásticas le dan las llaves nada menos que de una catedral y además de la de Nantes a una persona ilegal. ¿En manos de quién estamos?, ¿en manos de quién están nuestras señas de identidad? ¿Quiénes son estos curas tan pendejos? ¿Se han pasado los clérigos aplicando el Evangelio? ¿Quién es exactamente el pirómano? ¿Por qué hizo lo que hizo?

RTVE me cuenta que al ya autor confeso lo llamaban Emmanuel, ejercía de monaguillo desde hace unos cuatro o cinco años en la catedral, Era uno de los siete voluntarios encargados de la seguridad de la basílica y en ocasiones ayudaba durante la liturgia, señaló el rector, Hubert Champenois, que agregó que gozaba de toda su confianza y que nunca había ofrecido motivos para la sospecha. Según dijo el organista de la catedral, Michel Bourcier, a Presse Océan, el hombre "era extremadamente educado y era un habitual del lugar". La semana pasada, la Fiscalía señaló que el autor había pedido su regularización y había escrito correos electrónicos a varios miembros de la diócesis para reclamar su ayuda. No era la primera vez que solicitaba el estatus de refugiado, que le había sido denegado en anteriores ocasiones.

Todo son atenuantes y elogios hacia el metefuegos, como se puede observar. Claro, en realidad los dadivosos catedralicios se están defendiendo a sí mismos por la que pueda venir. Nada de 10 años de prisión y 150.000 euros de multa que es lo que supone el delito, como el chico está muy arrepentido y respetables caballeros de la Iglesia le dieron las llaves del templo y sus simpatías y confianza, que lo absuelvan y legalicen su situación ¿o es que acaso los auténticos culpables del incendio no somos todos por tener a un hombre en tales condiciones de vulneración de sus derechos humanos?

Sea francés o ruandés, católico o islámico, toda esta escalada de atentados contra nuestras raíces históricas, artísticas y culturales son intolerables y ya es hora de que la democracia ponga orden en todo esto antes de que lo tengan que hacer otras ideologías que coloquen drásticamente muchas cosas en su sitio, si bien hacerlo así, desde una perspectiva histórica, sea pan para hoy y hambre para mañana. Me resisto a aceptar que he luchado por la democracia para que se haya convertido en el refugio de corruptos, incendiarios, pensadores débiles y protectores del buenismo.