De Fray Luis de Leon
Hoy voy preso,
acusado de amor
y condenado
Nada importa
no hay sendas secretas
en esta noche
No me delatan
los pájaros nocturnos
entre sus alas
Baja el río
cantando coplas de amor
al prisionero
Casi dormido
en la sala de las sombras,
está perdido
Soñando besos,
buscará los rincones
que no existen
En la espera
percibo su perfume
que trae el viento
He visto el sol
con aroma celeste
de los lirios.