Puerta tan de cofradías
que emergen de ti a intervalos,
vieja Puerta de los Palos,
eternas cruces de guías.
Hay bóvedas altas, frías,
tras de tu reja y tu umbral.
Desde dentro es un puñal
la claridad presentida.
Desde fuera, oscurecida,
bosteza la Catedral.