Los medios y los días

Reflexionar sí, pero, ¿para qué?

Image
27 may 2023 / 04:00 h - Actualizado: 27 may 2023 / 04:00 h.
"Los medios y los días"
  • Reflexionar sí, pero, ¿para qué?

Hoy jornada de meditación o de reflexión, qué descanso que se disuelvan tantos ecos y no vuelvan hasta mañana por la noche y meses siguientes. Hay ecos, voces muchas menos, muchísimas menos, lo que escuchamos, hemos escuchado y supongo que escucharemos son ecos de unas voces muy manidas e insistentes. Creo que miles de personas van a reflexionar desde El Rocío, un lugar especial, apto o no para la reflexión, según se vea. Noto una Sevilla más calmada estos días rocieros, una Sevilla como más reflexiva. Gracias rocieros, y que ustedes reflexionen bien por allá por la Marisma o caminando por las arenas, como constatan los cantes por sevillanas, a mí las sevillanas rocieras me gustan por lo lentas que son, cansinas como dos bueyes avanzando, son los boleros de las sevillanas mientras que las de Feria me parecen el rock de las sevillanas y las corraleras el sabor del vino de reserva.

¿Qué reflexionar hoy? Yo llevo años reflexionando con especial intensidad. A mediados de los 80, cuando empezó la Perestroika, mi mente comenzó a cambiar. Al venirse abajo poco después tanto el muro de Berlín como la URSS fue cuando me dije que aquí estaba ocurriendo algo grave. Con el tiempo, mi reflexión me llevó a descreer de la izquierda como alternativa a la derecha sin dejar de estimar que la mayor parte de los problemas que padece el ser humano llegan desde la ideología de mercado. Eso se llama crisis intelectual, estar en la obligación de deconstruirse y reconstruirse. Sólo lo he logrado en la teoría, no hay nada empírico en mí que pueda ofrecerles salvo palabras parecidas a las que están oyendo ustedes desde una y otra parte, que son necesarias porque el humano no es tan sabio como para detener su marcha y reflexionar sobre sus actos sino que sigue adelante llevado por el poder de lo que ha ido creando siglo tras siglo. Sí, señoras y señores, desde el punto de vista intelectual soy un fraude, no tengo una alternativa sólida que ofrecerles, más allá de deseos como los que escuchan ustedes a diario en una sociedad llena de palabras lindas que son sólo ruidos agradables.

Hay que seguir adelante y seguir intentando conocer el mundo al que nos han traído. Cuando reflexiono, soy consciente de que no hay voces, sólo ecos, las voces no surgen así como así. Seguimos adelante en buena medida como pollos sin cabeza y aplicamos actuaciones como la reflexión democrática antes de unas elecciones sabiendo que no vamos a curar el mal de fondo pero que tampoco se puede uno quedar quieto porque seguro que la quietud no permite el avance a menos que consensuemos una quietud para reflexionar de verdad: como dice el catolicismo, examen de conciencia, dolor de los pecados. Como ya saben que dijo Descartes, crítica de los saberes recibidos, formulación de una nueva ética.

Sólo estoy seguro de una cosa, aquí, en mi tierra de nadie, en un lugar donde cuento con el cariño de bastantes personas que reflexionan a mi lado. Y lo diré con una frase que siempre se le ha atribuido al fascismo sin importarme en absoluto que me llamen fascista porque el profesor de mí mismo soy yo y por tanto el que se aprueba o se suspende soy yo y yo creo saber lo que soy y lo que no soy. España necesita orden, detener el balón, bajar la pelota y pensar a quién se la va a pasar. No es un orden tiránico ni dictatorial, es un orden desde la mesura, desde eso, desde la reflexión democrática. Esto es tan antiguo como el origen de los tiempos, si es que tal origen existió. Ni siquiera la materia pudo actuar en el universo hasta que no se enfrió, hasta ese momento no pudo “pensar”, no pudo ordenarse y desde ese orden llegó a crearnos a nosotros, con intervención divina o no, eso ya depende de cada uno de ustedes. Pero así fue.

Vamos a votar y esa será la noticia de los próximos meses. No olvidemos sin embargo que Alemania va camino de la recesión o ya ha llegado a ella, que Estados Unidos va por ese camino y que nosotros estamos de deudas hasta más allá de Plutón. Ya veremos de qué sirve en este contexto una simple papeleta. Justa y necesaria.


Revista Escaparate Empleo en Sevilla Más seguros Edictos