Pasa la vida

Salir con mascarilla a vivir la Cultura

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Juan Luis Pavón juanluispavon1
27 sep 2020 / 04:07 h - Actualizado: 26 sep 2020 / 12:08 h.
"Pasa la vida"
  • Salir con mascarilla a vivir la Cultura

Carlos Álvarez, el gran barítono, lo dijo alto y claro antes de un concierto: “No entiendo por qué he venido en un avión lleno pero tengo que cantar en un teatro vacío”. En el término medio está la virtud y los recintos culturales de aforo sentado o de recorrido de pie han de postularse ante la opinión pública como espacios seguros donde lo único que contagiarse sean curvas de estética y gotas de ética. Qué bien le vendría un coro de rastreadores, en ciudades como Sevilla, a la gran cantidad de personas dedicadas a profesiones culturales, tan perjudicadas por el confinamiento, para acreditar que, también desde el punto de vista de la prevención del coronavirus, es muy cívico y saludable el comportamiento del público con mascarilla en los teatros, museos, cines, galerías de arte, librerías, auditorios,... Necesitan que se active el boca-oído para generalizar el efecto llamada del retorno gozoso a las convocatorias culturales. Que también sirven para nutrir la mente con un menú distinto al del monotema pandémico y elevar el grado de motivación en un entorno de pesimismo.

Concluye la vigésimoprimera edición del ciclo Noches en los Jardines del Alcázar, cuyos organizadores han demostrado que era posible celebrar 75 conciertos estando el público con mascarilla y relajado. Distanciado con sillas vacías de por medio y a la vez concentrado en la interpretación de los músicos desde el escenario. Y abandonando tranquila y escalonadamente el conjunto monumental. Ese ambiente y esa actitud también se ha vivido en conciertos pop en el Auditorio de la Cartuja y en la explanada exterior de Fibes. No es ninguna traición a la música disfrutarla sentado y sin moverse durante más de una hora. Tampoco al compás de la Bienal de Flamenco, felizmente mantenida en cartel.

El otoño enmarca cada año uno de los periodos con más actividad cultural en Sevilla. Y bajo techo, un factor que en términos generales causa recelo hoy en día porque se considera mucho más seguro socializarse al aire libre. Pero son los comportamientos y no las ventilaciones lo más importante para evitar riesgos o para incurrir en ellos. Sin duda, se está más a salvo del coronavirus viendo la exposición de Carmen Laffón en el Monasterio de la Cartuja, una buena película en el Odeón Plaza de Armas, una comedia teatral en Sala Cero o un concierto en el Teatro de la Maestranza, que compartiendo un cumpleaños de barbacoa en el jardín de un chalé.