¡A la calle! ¡Todo por los túneles de la SE-40! (39 en Canarias). No se va a armar la trifulca sólo para pedir la salida de Lopera del Betis, ya que no nos movemos ni por los barrios más pobres de España ni por el 22 y pico por ciento de paro ni por el 17 por ciento de gente en riesgo de pobreza ni porque ya vayamos para 12 años en los que en Sevilla no se hace nada de relieve, propio de la megápolis del sur de Europa, a ver si con los túneles nos sumergimos en una llamarada cívica y ciudadana.
Pero lo dudo. Lo de Lopera era cosa de los béticos y ahora los “progresistas” dirán que es algo orquestado por el facherío y en Madrid afirmarán lo mismo. Las dos Españas de nuevo. Así que, como mal menor, el puente, y otra vez a discutir sobre el impacto visual, como con la Torre Pelli y Las Setas. Por cierto, qué pena, tanto Madrid, Madrid... Sostiene el consejero de economía que somos la segunda región que más exporta, tras Cataluña. Qué alegría cuando en un siglo de estos no necesitemos ni a Madrid ni a Bruselas para hacer unos túneles para los que ya tenemos tuneladoras pero no hay pasta. Aquí se impone una colecta, si hubiéramos comenzado sobre el 2001 que es cuando se empezó con los túneles, ya tendríamos al menos medio agujero hecho y derecho. Claro que en Bilbao se va a hacer algo similar pero allí hay un segmento empresarial fuerte con su partido, el PNV, y su escuela de formación de élite empresarial con muchos años de antigüedad, allí saben que es Madrid quien tiene que pedirles a ellos y no al revés.
Y claro que antes de mediados del XIX se hicieron túneles como el de la SE-40 en Londres porque allí se habían emprendido unas actividades frenéticas llamadas revoluciones industriales que en Andalucía y en Sevilla olimos poco, nosotros en esas fechas íbamos cuesta abajo, perdiendo todo el imperio latinoamericano y con un ejército mal armado y una dinámica política corrupta.
Ya en nuestros días, todo el mundo sabe que el tren Londres-París va por debajo no de un río sino de la manga de un mar y que el metro de Nueva York pasa por entre los cimientos de sus rascacielos. Aquí la línea 1 del metro se introduce bajo el río al lado de la Torre del Oro, pero se necesita mucho más poderío para que los túneles de la SE-40 sean ya una realidad como lo debería ser el metro. Antes han soterrado en Madrid la M-30 y en Valencia y Bilbao se han hartado de extender el metro.
Por tanto, no nos queda más remedio que el derecho al pataleo. Pero propongo que si nos tenemos que movilizar exijamos que los túneles sean de cristal, como en el acuario, y veamos pasar por los lados y por encima carpas, barbos y algún pez gato, ya que los esturiones se fueron también de Sevilla como se fue todo su falso esplendor de palacios y monasterios, hoy en manos públicas o en ruinas o muy enfermitos.