Cambios a la vista en el PSOE-A

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25 ene 2020 / 08:00 h - Actualizado: 24 ene 2020 / 11:12 h.
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  • Susana Díaz. / EFE - Archivo
    Susana Díaz. / EFE - Archivo

Aunque no se conocen las fechas de celebración de los Congresos del PSOE, ya comienzan los movimientos que dejan ver, en el caso de Andalucía, que no será fácil hacerse con la Secretaría General del PSOE-A. Del mismo modo que Pedro Sánchez conseguirá continuar sin problemas en su cargo dentro del partido, Susana Díaz tendrá que pelear con todas sus fuerzas contra los adversarios que se encuentre enfrente.

Son varios factores los que van a condicionar ese próximo Congreso que llega y, por tanto, los cargos que se ocupen estarán, igualmente, subordinados al efecto de esos aspectos del pasado reciente que tanto han zarandeado al PSOE y, en concreto, a su federación andaluza.

Susana Díaz tropezó de forma notable al tratar de ganar las primarias de su partido ante Pedro Sánchez. Este se hacía con el cargo y lo que se conoce como ‘susanismo’ comenzaba a desmoronarse. Aunque quedaba por llegar algo mucho peor: Susana Díaz perdería la presidencia de la Junta de Andalucía a manos de la coalición de las derechas que sumaron PP C’s y Vox y que aún sigue instalada en el Palacio de San Telmo.

Por otra parte, podría parecer un detalle sin importancia que Susana Díaz sea la primera candidata que intenta acceder a la Secretaría General del PSOE-A sin ser presidenta del Gobierno andaluz. Pero tiene mucha trascendencia puesto que eso permite al sector reformista y más contrario a Díaz levantar la voz diciendo que el proyecto está agotado y que un cambio radical es necesario si se quiere volver al lugar que se ocupó durante 37 años.

Mientras algunos miembros de la ejecutiva sevillana dimiten en nombre de la ‘falta de sintonía’ con Verónica Pérez, Susana Díaz hace guiños desesperados a Pedro Sánchez que es, ahora, todopoderoso en el partido. En la carta que ha enviado a más de 40.000 militantes andaluces, les pide unidad y firmeza contra las derechas y un claro vínculo con el presidente Sánchez.

Sin embargo, algo no va bien en el seno del PSOE-A cuando, por ejemplo, Verónica Pérez califica las dimisiones de Manuel Domínguez, Jerónimo Guerrero y Carmelo Cubero (antes lo hizo Rafael Recio) como ‘irrelevantes’. Y es que esa forma de tratar temas tan serios suele indicar cierta prepotencia y una falta de empatía considerable que no permite a algunos percatarse de la dimensión del problema. Además de irse, con cajas destempladas, algunos miembros de la ejecutiva sevillana; comienzan a sonar nombres de posibles candidatos que advierten de lo que va a suceder. Uno de ellos es Juan Espadas, actual alcalde de Sevilla. No será gratis el puesto de secretario general de la federación andaluza. Y de una falta de cohesión que antes parecía ser el paradigma del partido perfecto.

El PSOE necesita un secretario general de Andalucía que sepa cuál es el papel institucional del partido, que conozca qué rol representa Andalucía respecto al conjunto del Estado español y que tenga como objetivo servir de canalizador de su fuerza respecto a la calle Ferraz.

Veremos.