Desesperación ante la tercera ola de Covid-19

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18 ene 2021 / 14:07 h - Actualizado: 18 ene 2021 / 14:10 h.
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  • Pedro Sánchez y Salvador Illa. / EFE
    Pedro Sánchez y Salvador Illa. / EFE

Desde la Junta de Andalucía dicen estar desesperados ante el número de contagios diarios, la presión hospitalaria y el número terrible de muertos. En Castilla León han tomado medidas que ya está recurriendo el Gobierno central ante el Tribunal Supremo. Otras Comunidades Autónomas se muestran incapaces de afrontar la situación. Y no parece que la tercera ola haya llegado, ni mucho menos, al pico máximo antes de descender. Sin embargo, desde el Gobierno, lejos de entender lo que está pasando o, mucho peor, entendiendo perfectamente el problema aunque cargando el peso de la gestión en las Comunidades Autónomas y desplegando un tacticismo político inaceptable en estos momentos, no toman medidas y modifican un decreto de Estado de Alarma que envejeció hace muchas semanas, un decreto de Estado de Alarma que ha servido, sobre todo, para que Sánchez pudiera eludir el control parlamentario a su gestión.

La tercera ola ha llegado con unas estadísticas muy poco ilusionantes. Al contrario, todo parece apuntar que será la peor de las tres que se han producido hasta ahora. Moreno Bonilla y Urkullu son dos de los presidentes que ya han pedido por activa y pasiva un cambio en el rumbo que ha tomado el Gobierno. Lejos de conseguirlo, Illa descartaba el confinamiento estricto la pasada semana y no dio muestras de estar buscando alternativas más suaves al que ya sufrimos durante la pasada primavera.

Es muy posible que los españoles terminemos en casa durante un par de semanas. Y ese momento llegará cuándo ya no sea posible una solución con menos contagios, menos hospitales colapsados y menos muertos. Si, además, la campaña de vacunación sigue siendo difusa y lenta, estamos a las puertas de otro capítulo más de la tragedia española moderna.