10 pueblos ‘limpios’ de COVID y otros 10 con la incidencia por las nubes
Horas antes de que la Junta tome decisiones, solo quedan diez pueblos libres de coronavirus en la provincia, como El Castillo de las Guardas o Coripe, mientras que en otros diez, como Las Cabezas o La Puebla de Cazalla, la incidencia es galopante
El coronavirus sigue campando a sus anchas en todo el país en esta tercera ola que promete ser más feroz aún que las anteriores, mientras las administraciones discuten sus propias competencias y siguen dejando pasar las horas para tomar decisiones contundentes. En la provincia de Sevilla, hay ahora mismo una decena de pueblos donde la incidencia del COVID-19 parece haberse desmadrado por completo. Entre los pueblos más o menos grandes, destaca Los Palacios y Villafranca (38.500 habitantes), que ha pasado de tener una tasa de infectados por cada 100.000 habitantes de 255 el pasado fin de semana a amanecer el lunes con prácticamente el doble. La tasa subió el martes a 487; el miércoles, a 534; y hoy jueves, a 636. Solo en la última semana, 166 palaciegos han contraído el virus, según datos de la Junta. 54 de ellos, en las últimas 24 horas. Un ritmo parecido de contagio parece el de la localidad vecina de Las Cabezas de San Juan (16.500 habitantes), cuya tasa se sitúa ya en 950, con 95 contagiados en los últimos siete días. Su alcalde, Francisco José Toajas (PSOE), compareció públicamente ayer para mostrar su profunda preocupación, para denunciar que hasta los agentes de la Policía Local sienten cierto desaliento en su labor y que, desde luego, el Ayuntamiento cabeceño está esperando instrucciones del Gobierno andaluz para cumplirlas a rajatabla. “Aquí van a encontrar una complicidad absoluta, se tome la medida que se tome”, insistió Toajas. En otro extremo de la provincia, en El Viso del Alcor (19.200 habitantes), la tasa supera ya los 600.
Esta locura de contagios se está dando también en municipios más pequeños como La Puebla de Cazalla (11.000 habitantes), que está a punto de alcanzar la tasa del 1.000, o muy pequeños, como Lora de Estepa, con una tasa de 812. En esta misma comarca del este de la provincia, Osuna (17.000 habitantes) llega ya a una tasa de 780 contagios por cada 100.000 habitantes. Hasta la alcaldesa, Rosario Andújar, lo ha contraído. También el alcalde de El Cuervo, Francisco Javier Martínez, ha dado positivo.
En el Aljarafe, el municipio de Umbrete (8.800 habitantes) presenta hoy una tasa de 595, con 24 positivos nuevos en esta última semana. En Benacazón (7.200 habitantes), la tasa es parecida: 566.
La incidencia en pueblos pequeños de la provincia la lidera el caso de Pruna, con una tasa de 5.416 contagios por cada 100.000 habitantes. Este pueblo de la Sierra Sur solo tiene 2.600 vecinos, y en la última semana se han contagiado 95. Las Navidades, desde luego, han sido claves en la incidencia de un pueblo que no tuvo ningún caso hasta hace solo unos meses. Otros pueblos pequeños con una incidencia de vértigo son El Garrobo (3.417), Algámitas (2.948) o Gilena (1.341).
Cero contagios y cero muertos
En una situación diametralmente opuesta también hay municipios en la provincia de Sevilla, donde ya se registran 1.205 fallecidos desde que empezó la pandemia. Pueblos como Castilleja del Campo, El Castillo de las Guardas, La Navas de la Concepción, El Ronquillo o Coripe (todos ellos con poblaciones de en torno a mil habitantes), no solo tienen la tasa de contagios a cero, sino que no han registrado ningún fallecimiento por este motivo hasta ahora. Aguadulce, por su parte, aunque mantiene la tasa a cero, ha registrado dos muertos por coronavirus. El Pedroso, que ha conseguido poner su contador a cero hace solo unos días, ha registrado tres defunciones por COVID-19; El Real de la Jara, solo una; Villanueva del Río y Minas, solo tres; y en Los Molares, igualmente con la tasa de contagios por cada 100.000 habitantes a cero en los últimos 14 días, ha registrado solo dos defunciones por este motivo.